Cuando el partido terminó, el último tuit de Emanual Ginobili podría resumir el sentimiento de los argentinos que siguieron el encuentro: Como diría un comediante famoso ARG. LUIFA: "Tengo unas ganas de darte un abrazo!!" QUE JUGADOR LPQLP!!!!
Es que el pivot se puso el cuadro al hombro y en un final donde la pelota quemaba embocó todo lo que tiró. Incluso el último libre, que a falta de 1,7 segundos tiró a errar para que se consumiera el tiempo. Además, los cuatro triples de Carlos Delfino y los otros dos de Pancho Jasen ayudaron a cimentar la victoria.
El partido tenía todo en lo previo. Era una clásico en el que el ganador seguirá en el Mundial y el perdedor volvería a casa. Además, en el centro de la escena estaba Rubén Magnano. El gran hacedor de la generación argentina que logró el subcampeonato del mundo en Indianápolis 2002 y la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004 debió enfrentarse a sus ex dirigidos como entrenador de Brasil.
Del otro lado, “el Oveja” Sergio Hernández planteó un gran partido y se quedó con el pasaje a cuartos apoyado en el trabajo de sus jugadores. El trámite del encuentro fue muy ajustado –primer cuarto 25 - 25, el segundo 48 - 46 y el tercero 66 - 66– y recién en el último cuarto Argentina se escapó a seis puntos con las bombas de Scola. Huertas puso un triple para Brasil con un salto acrobático, pero no alcanzó porque Scola le había bajado la persiana al partido desde hacía rato.
Los cuartos quedaron así…
Serbia – España
Turquía – Eslovenia
Estados Unidos – Rusia
Lituania – Argentina
