El domingo fue una tarde de violencia en el fútbol uruguayo. Además de los incidentes en el Tróccoli también fueron agredidos los parciales de Defensor.
Algunos hinchas de Danubio abandonaron el Saroldi, donde su equipo perdió ante River, y no tuvieron mejor idea al pasar por el Nasazzi que apedrear a la gente de Defensor que salía de ver a su equipo.
Los proyectiles rompieron el ómnibus del plantel principal y el auto del presidente de Defensor Dante Prato. No hubo heridos y la Policía detuvo a un parcial danubiano.
Prato responsabilizó a la seguridad. “Estaba visto que no podían jugar Danubio y Defensor a la misma hora y en el mismo lugar”, dijo. Pidió una reunión con el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, y anunció, según consigna El País, que Danubio “también va a tener lo que merece”.
La directiva de Danubio sacó un comunicado en la que asegura que está "consternada" y en sesión permanente con la finalidad de esclarecer los "lamentables" hechos.
"Desde ya expresamos nuestro total y absoluto repudio para con los referidos hechos de violencia y como consecuencia toda nuestra solidaridad para con Defensor Sporting Club", dice el comunicado.
El documento expresa en el final la "expresión de máxima solidaridad y amistad para toda la familia de Defensor".