Según un último sondeo llevado a cabo por la Televisión suiza sobre este tema, sólo el 30% de los suizos votarán a favor de las seis semanas de vacaciones por año.
Preguntado por el diario suizo Le Matin sobre este tema, Gilbert Gress, un entrenador de fútbol francosuizo responde con tono bromista que "si pudiéramos votar aquí en Francia por las seis semanas de vacaciones, ganaría el sí con el 90% de los votos".
El gobierno suizo está opuesto a este texto, al igual que los círculos económicos, según los cuales la competitividad de Suiza, donde los costes salariales ya son muy elevados, padecerían enormemente, con un alza del paro como consecuencia.
La patronal suiza, EconomieSuisse, se opone al proyecto, debido al ejemplo francés considerado poco atractivo. Con sus 35 horas semanales, "los franceses tienen bastante más tiempo libre que los suizos y esto no ha aportado mucho" al país, indica la organización. Y añade que en Francia "la tasa de paro es elevada y la economía está debilitada".
El voto del 11 de marzo está organizado por iniciativa de la organización sindical Travail.Suisse, según la cual un tercio de los activos en Suiza sufren de estrés en el trabajo y dos semanas de vacaciones adicionales podrían remediarlo.
Según ellos, ha llegado la hora de que los trabajadores recojan los frutos del alza de la productividad, que se disparó un 20% entre 1992 y 2007, mientras que los salarios reales no han progresado más que un 4,3% en el mismo tiempo.
Otro tema sometido a la votación de los suizos el domingo, la limitación al 20% de las residencias secundarias en las comunas, un tema que se aplica sobre todo a las estaciones de esquí de los Alpes suizos, donde abundan las construcciones de enormes edificios de apartamentos de vacaciones.
Sobre este texto, los sondeos muestran que las opiniones están divididas, con una ligera ventaja por el sí.
La iniciativa de este proyecto parte de la suiza Vera Weber, quien llamó su texto "para acabar con las construcciones invasoras de residencias secundarias".
"Queremos detener la desfiguración de los paisajes y la explosión de los precios inmobiliarios para la población local", declaró Weber al diario suizo Le Temps. Para ella es necesario que "el alojamiento hotelero vuelva a ser una prioridad" en las montañas.
Weber es hija de un militante ecologista muy conocido en Suiza, Franz Weber, quien creó una fundación que se ocupa de la protección de la naturaleza.
Los referéndum son un elemento esencial de la democracia directa en Suiza. Cuatro veces al año, se celebran votaciones sobre los temas más dispares.
