La ley 16.104 de 1990 dice que “las funcionarias madres, en los casos en que ellas mismas amamanten a sus hijos, podrán solicitar se les reduzca a la mitad del horario de trabajo y hasta que el lactante lo requiera, luego de haber hecho uso del descanso puerperal”.
Para las madres que trabajan en el sector privado rige la ley 15.084 de 1980, que establece un período de licencia maternal de doce semanas.
El proyecto que está en discusión en el gobierno y en la bancada bicameral femenina amplía la licencia por maternidad a 14 semanas, obedeciendo a los convenios internacionales. También se establece un plazo de seis meses de medio horario por lactancia para el sector público y privado y se introduce la licencia paternal: durante esos seis meses el padre podría pedir entre 10 y 15 días de licencia.
El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Eduardo Brenta, dijo a No toquen nada que se ha discutido sobre los recursos disponibles del punto de vista presupuestal para este proyecto. "Hemos evaluado inclusive hacerlo en forma gradual para minimizar este impacto", indicó.
También se ha analizado el impacto sobre el mercado de trabajo que puede tener la inclusión de un régimen de este tipo. Según el ministro, desde la cartera entienden que esta medida puede impulsar a muchas mujeres a incorporarse al mercado de trabajo, algo que "es clave en un país que tiene la tasa de desempleo más baja de su historia".
El gobierno estima que una medida de este tipo, si fuera con recursos exclusivamente del Estado, tiene un costo de 20 millones de dólares anuales. Brenta informó que el 40% de las mujeres y el 90% de los hombres con hijos de cero a tres años trabaja a tiempo completo.
El ministerio impulsará la discusión de estas medidas en los consejos de salarios.