El estudio de ID Retail se realizó desde febrero de 2011 a abril de 2012, y utilizó las técnicas de entrevista y de focus group (grupos de discusión) para recabar la información. En total se realizaron 30 entrevistas (a feriantes, puesteros, minoristas, supermercados, grandes cadenas y compradores del interior) y 18 grupos de discusión (de amas de casa, mixtos y de adolescentes).
La principal conclusión del informe es que hubo entre los consumidores “una transición hacia hábitos alimentarios más saludables que consideran una disminución del consumo de carnes rojas y de fritos, una mayor variedad de alimentos y un aumento del consumo de verduras en distintas preparaciones”. El informe señala que en la mayoría de los casos se declaró un consumo de al menos 3 o 4 frutas y verduras por semana.
Además, se observó que la razón que más lleva a decidir por una alimentación saludable son los problemas de salud, y por ello se detecta que a mayor edad, mayor cuidado en la alimentación.
Por otra parte, el informe concluyó que hay una mayor incidencia de la información que transmiten la escuela y los médicos en la alimentación del hogar, y que es importante que el foco de las campañas de consumo de frutas y verduras sean los niños, para “generarles buenos hábitos” y que “actúen como influenciadores en su hogar”.
Según el informe, la población que menos consume frutas y verduras es la menor de 30 años, que manifiesta que “no les gustan” (sobre todo las verduras), que “hay cosas más ricas” y que “no llaman la atención”. La población de entre 12 y 14 años afirma además que siente vergüenza de llevar fruta de merienda a la escuela o el liceo, y que las verduras son mal vistas en el almuerzo.
Otra de las excusas que el informe señala como frecuentes para no consumir suficientes frutas y verduras es la falta de tiempo, y acota sobre esto que es importante insistir con la información y hacer de los productos algo atractivo y motivador.
Los casos de adolescentes que sí se preocupan por mantener una alimentación sana están influidos por la familia y por el deseo de lograr mayor rendimiento físico (en el caso de los deportistas) y de verse bien (aumentar la estatura, controlar el acné y mejorar el cabello y las uñas), según afirma el informe, y sobre esto añade que son pocos los institutos educativos que controlan los alimentos que se les vende a los alumnos, aunque los adolescentes manifiestan que necesitan estímulo y más propuestas de consumo (“para que se legitime entre sus pares”), y no tanto información, para comer más frutas y verduras.
En relación con otros aspectos del consumo de frutas y verduras, el informe de ID Retail observó que en general hay desinformación y conceptos erróneos sobre el pasaje de productos por cámaras, y que se suele pensar que este proceso desmerece a los productos y los hace menos naturales.
Además, señala que para muchos consumidores el supermercado está asociado con productos de cámara, menos naturales y más caros, mientras que la feria se asocia con productos más frescos y económicos.
Por otra parte, también se detectó que ni las marcas ni la certificación de productos orgánicos se valoran aún en el mercado de las frutas y verduras, y que en general se considera que la mercadería que se comercializa en nuestro mercado es de buena calidad y ofrece garantías al consumidor.
A partir de toda la información recabada, el informe recomienda al Mercado Modelo difundir información sobre los beneficios que ofrece el consumo de frutas y verduras, acercar al consumidor variantes (recetas) en las formas de consumo de estos productos y desarrollar formas de comercialización que respondan a las preferencias de los distintos segmentos del público (ofrecer productos frescos, lavados, cortados, congelados o semipreparados).