El Estado puso de gerente general de Pluna a Sebastián Hirsch, luego de la salida de Leadgate y el argentino Matías Campiani. Hirsch era la mano derecha de Campiani y trabajaba como asesor financiero.
Este miércoles, los ministros de Economía y Transporte, Fernando Lorenzo y Enrique Pintado, estuvieron en la comisión de Transporte para explicar la salida de Leadgate, accionista mayoritario de la empresa.
Allí la oposición cuestionó la presencia de Hirsch en el directorio, la cláusula de indemnidad que se aprobó y el pago de despido a Campiani.
Martínez, presidente de la comisión de Transporte, coincide en que Hirsch debe irse del directorio. "Era parte de lo que nosotros cuestionábamos y el gobierno quiso que se quedara para que la transición sea ordenada. Respeto la decisión que se tomó, pero creo que debe irse cuanto antes, eso es lo mejor", afirmó.
El nuevo directorio de la empresa quedó conformado por los tres de Pluna Ente Autónomo: Fernando Pasadores, Ignacio Berti y Daniel Delgado Sicco (oposición). También están los directores generales Pedro Apezteguía (Ministerio de Economía) y Pablo Ferrer (Ministerio de Transporte). El lunes se reunieron por primera vez y su objetivo será conseguir un nuevo socio que capitalice la empresa.
Para Martínez, la realidad de la empresa Pluna permitirá negociar en mejores condiciones que en 2007, cuando se acordó con Leadgate. "No es la misma situación que cuando se fue Varig y entró Leadgate. Aquello eran los harapos de una empresa y hoy tenemos una empresa funcionando, con aviones y líneas. Se discutirá eternamente lo que pasó y si hay que anotarse en una lista para decir a quien no le gustaba Leadgate, no sólo yo, sino la mayor parte del gobierno se anota. El tema fue que en ese marco el único interesado fue Leadgate y eso generó los problemas que hubo", afirmó.
En la comisión, el ministro Pintado dijo que se mantiene el interés de la canadiense Jazz en capitalizar la empresa y adquirir las acciones de Pluna. Por eso van a esperar los 30 días de plazo que dieron.
Deudas
Según los números que manejó el senador del Partido Nacional Carlos Moreira en la comisión, lo único al día en Pluna son los sueldos.
Después hay una deuda con el Scotia Bank, donde el Estado es garante. En agosto vence otra cuota de esa deduda y se deben abonar nueve millones de dólares (la deuda total es de 126 millones de dólares). También hay una deuda con el Banco de la República por 17 millones de dólares y con Ancap por 25 millones de dólares.
Otros pasivos en los que el Estado tiene que pagar el 25% y deudas con los acreedores comerciales, que aún no se sabe cuánto es el monto.