Mujica dijo en su espacio semanal en radio M24 que si la inflación supera el 10% se corre el riesgo de perder “todo lo que hemos conquistado” respecto a mejoras salariales y económicas del país.
Por esto, dijo que “la batalla principal se llama detener la inflación” y que “todos tenemos nuestra cuota de responsabilidad en lo que pasa y en lo que pasará en el porvenir” respecto a la inflación. “Tontos de nosotros si perdemos todo lo que hemos conquistado”, comentó. Además, afirmó que no quiere transferirle al próximo gobierno la necesidad de un ajuste fiscal.
Mujica se refirió al momento actual de la economía mundial y dijo que en este sentido Europa “se cae a pedazos” y que eso pone en riesgo la capacidad de exportar del país. Dijo que el país está con “muy poca capacidad de maniobra” para hacer frente a contingencias que puedan surgir en el campo internacional, y que eso es “enormemente peligroso”, porque considera que compromete las conquistas “que hemos logrado ir arrimando entre todos”, sobre todo a favor de los más humildes.
Si bien dijo más de una vez que todos somos responsables de lo que suceda con la inflación, se dirigió en específico a los sectores de ingresos medios y altos de la población y también a los trabajadores. Dijo que “no contribuir a incrementar (la inflación) es casi una especie de deber nacional de los sectores de medianos ingresos para arriba”, y apeló también a “la conciencia y el compromiso de los trabajadores”, porque “la llama inflacionaria” perjudica más a los trabajadores de menores ingresos.
“No deberíamos caer en ningún autoengaño: todos somos responsables. Gobierno y trabajadores organizados. Aquellos que tienen mejores ingresos, en este momento especial de la conyuntura inflacionaria, deberían no dar más presión a esa inflación”, dijo.
Mujica se refirió en específico a la presión sobre los ajustes de salarios. Dijo que en el país cuando se ajustan los salarios se recupera “con todo el derecho” lo que se perdió por inflación y se suman algunos puntos hacia adelante, pero que la actual “no es una coyuntura para sumar puntos hacia adelante, porque debemos parar esta presión”.
Por otra parte, el presidente habló de la importancia de conservar la credibilidad del Banco Central. Dijo que en los últimos tiempos las afirmaciones del Banco Central se hicieron no creíbles, y que hay que reparar y recuperar la fe pública en lo que dice. “Si el Banco Central hace anuncios de que la inflación se va a mover entre el 5% y el 7%, allí tenemos que estar. Y hemos estado mirando para el otro lado haciéndonos un poco condescendientemente los distraidos, tal vez por afán de repartir más”, comentó.