La decisión de alquilar una aeronave responde a que la cancillería "aconsejó la no utilización del avión presidencial T-01 para dicho viaje, en razón de la postura agresiva de los fondos buitre con Argentina", señala un comunicado firmado por el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli.
Según Parrilli, "era altamente probable el intento de reclamos, medidas precautorias o de ejecución sobre dicha aeronave".
Según el texto, el ministerio de Relaciones Exteriores estimó que "las gestiones que se pudieran realizar ante los Gobiernos respectivos podrían no resultar suficientes para despejar la posibilidad de que se dicten medidas en contra del Tango-01".
El país acaba de sufrir en Ghana, a pedido de fondos especulativos, un embargo por más de dos meses de la Fragata "Libertad", buque insignia de la Marina cuyo regreso a Argentina está previsto este miércoles en Mar del Plata.
El embargo fue decidido por un juez ghanés que hizo lugar a una demanda del fondo especulativo NML Capital que reclamaba 370 millones de dólares por un impago de la deuda argentina que cayó en default en 2001 por unos 100.000 millones de dólares.
En el comunicado, Parrilli precisa que "el costo total del alquiler (del avión) a abonar a la empresa privada asciende a U$S 880.000, que incluye todos los costos y gastos del viaje por 4 países, y que es alrededor de un 20% superior a la operación en el T-01".
Según los datos oficiales, el costo del mismo viaje realizado en el T-01 se elevaría a 730.000 dólares.
El comunicado, aclara Parrilli, responde a versiones publicadas por el diario inglés The Sun, según las cuales el gobierno argentino alquiló un avión de una empresa británica "para el viaje oficial de la presidenta Cristina Kirchner a los países de Cuba, Emiratos Arabes Unidos, Indonesia y Vietnam".
La elección de la empresa inglesa Chapman Freeborn fue "por resultar la más conveniente desde el punto de vista operativo, económico y financiero", frente a otras cinco ofertas, señaló.
El parte recuerda que el gobierno había contratado los servicios de esa misma empresa en 2010 y 2011 para otros viajes de la presidenta a Guyana, Madrid y París, y Barcelona y Cannes.