"Trece años después del fin de los ensayos en el Pacífico y la ratificación por Francia del Tratado de prohibición de los ensayos, era hora de que nuestro país estuviese en paz consigo mismo", declaró el ministro de Defensa, Hervé Morin, en una conferencia de prensa. El ministro consideró al dispositivo "justo" y "riguroso" y basado "en una voluntad de transparencia total".
Varios centenares de personas podrían ser indemnizadas -de los 150.000 trabajadores civiles y militares que participaron en las pruebas entre 1960 y 1996 en el Sáhara, antes de la independencia de Argelia en 1962 y luego en Polinesia Francesa.
Los casos, confirmó Morin, serán examinados por un comité de expertos presidido por un magistrado que deberá emitir una proposición en un plazo de seis meses. Las 18 enfermedades que serán reconocidas son las mismas que las de la lista establecida por las Naciones Unidas, entre ellas leucemia, cáncer de mama y de tiroides. El ministerio de Defensa francés reconoce varios incidentes, sobre todo en cuatro ensayos realizados en el Sáhara.
El presidente de la Asociación de Veteranos de Pruebas Nucleares, Michel Verger, habló de "avances notables", pero también de "puntos que deben ser mejorados" en el proyecto. Verger expresó su satisfacción por el hecho de que no haya sido fijado tope alguno de radiación, ya que "ello habría excluido a la casi totalidad de los veteranos".