Cartes, un magnate y dirigente deportivo de 56 años, lideraba cómodamente la votación en Paraguay con 46,1% al computarse el 35% de las mesas, informó oficialmente el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) en su página web.
Alegre del oficialista partido Liberal, quien admitió el triunfo de su rival, se mantenía segundo con un 36,9%.
"Procuramos obtener el triunfo, no ha sido posible. El pueblo paraguayo se ha pronunciado, y nosotros respetamos (...). La ciudadanía ha resuelto a través de su participación, de su decisión, de manera transparente, en un proceso que nosotros consideramos adecuado, un proceso que garantiza el resultado", dijo el senador y exministro de Lugo (2008-11).
Luis Alberto Mauro, coordinador de la comisión nacional de elecciones del TSJE, dijo que a las 20H00 locales (00H00 GMT) se darán a conocer las cifras oficiales tras el conteo del 100% de los votos.
El nuevo presidente asumirá el poder el 15 de agosto en sustitución de Federico Franco, quien completó el período iniciado en 2008 por el exobispo católico Fernando Lugo, destituido por el Congreso el 22 de junio, acusado de "mal desempeño de sus funciones".
Las elecciones de este domingo permitirán superar la crisis política que provocó la suspensión de Paraguay de los foros regionales Mercosur y la Unasur. La salida de Lugo fue tildada de "golpe parlamentario" por el expresidente y sus aliados políticos de la región.
"Voy a entregar el poder a cualquiera sea que gane estas elecciones para reinstitucionalizar la república de este país", dijo poco antes de la apertura de los centros de votación el mandatario Federico Franco, que asumió interinamente en junio.
Más de 300 observadores extranjeros y unos 1.200 nacionales supervisaron los comicios.
El jefe de la misión de la OEA, el expresidente de Costa Rica, Oscar Arias, dijo a la cadena CNN que "nunca se debió expulsar a Paraguay de los organismos regionales" y destacó la jornada electoral en que triunfó Cartes.
"Sin duda ha sido elegido en una contienda electoral ejemplar", señaló.
En el centro de Asunción se oían bocinazos y el estallido de petardos, mientras frente a la residencia de Cartes, en el exclusivo barrio de Carmelitas, militantes vestidos de rojo festejaban eufóricos, según imágenes trasmitidas por la televisión.
El asesor técnico del TSJE, Luis Salas, dijo que, según cifras preliminares, la participación había sido del 75%, en una jornada electoral calurosa y soleada que transcurrió con normalidad. En los últimos comicios, un 65% de los paraguayos llamados a las urnas votó.
En las filas de los centros de votación se palpaba el triunfalismo de los colorados desde temprano en la mañana.
"Este va a ser un día histórico. Regresará el partido Colorado y será por muchos años más. En 2018 volveremos a ganar", pronosticaba Miguel Pereira, un economista de 50 años, antes de votar en el Colegio Nacional Presidente Franco, en pleno centro de Asunción.
Cartes lideró las encuestas de intención de voto sobre Alegre hasta principios de abril, cuando los liberales y los seguidores del caudillo colorado Lino Oviedo, fallecido en un accidente de helicóptero en febrero, sellaron un pacto electoral que volvió más reñida la contienda.
El candidato colorado, de 56 años, un recién llegado a la política que votó por primera vez en 2010, es un exitoso empresario y dirigente del club de fútbol Libertad, señalado por sus adversarios de contrabando de cigarrillos y vínculos con el narcotráfico. En 1985 estuvo preso tres meses por un caso de evasión de divisas, del que fue finalmente sobreseído en 2002.
La izquierda, dividida en dos grandes grupos tras la caída de Lugo, espera convertirse en la tercera fuerza.
Según las encuestas a boca de urna, el exobispo católico, de 62 años, que reconoció a dos hijos concebidos mientras era sacerdote y enfrenta reclamos por paternidad por otros dos niños, obtuvo una banca al Senado.
Unos 3,5 millones de paraguayos estaban habilitados para votar en comicios que permitirán poner fin a la crisis política del año pasado.
Además de presidente, sin posibilidad de reelección, los paraguayos elegían este domingo un vicepresidente, así como 45 senadores y 80 diputados, representantes en el Parlamento del Mercosur y autoridades departamentales, por un período de cinco años.
Por primera vez fueron autorizados a votar unos 22.000 empadronados en Argentina, España y Estados Unidos.
Cartes, un polémico empresario sin experiencia política
Horacio Cartes, electo presidente de Paraguay este domingo, es un multimillonario recién llegado a la política, asociado al narcotráfico por sus detractores y tachado de improvisado, pero considerado por muchos un 'rey Midas' capaz de desarrollar al país.
Este exitoso empresario y dirigente deportivo de 56 años, que votó por primera vez en su vida en las elecciones municipales de 2010, logró regresar al poder al conservador partido Colorado, hegemónico por seis décadas hasta 2008 y pilar de la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-89).
Titular de un grupo de 25 empresas y presidente del club de fútbol Libertad, campeón paraguayo en 2012, Cartes se afilió en 2009 al centenario partido Colorado, administrador histórico del Estado paraguayo, el cual le permitió competir por la presidencia a pesar de su corta militancia.
La meteórica carrera política de Cartes, acusado de haber ganado las internas partidarias "a billetazo limpio" y tildado por propios y ajenos de "mecenas partidario", lo llevó no obstante este domingo al sillón del Palacio de Gobierno, desde donde promete "generar y gestionar empleo" en un país donde 40% de las personas viven en la pobreza, según cifras oficiales.
"Si Dios me dio habilidades en la vida empresarial, creo tener condiciones para volcar esas habilidades en la política", dijo a la AFP este católico declarado, cuyas invocaciones a Dios y a la Virgen son constantes en mitines y otras apariciones públicas.
Cartes, para muchos un pragmático administrador que puede "empujar" al país al desarrollo industrial que necesita, es titular de un conglomerado de empresas, entre las que destacan las tabacaleras, pero que también incluye bancos, financieras y casas de cambio, cultivos de soja y embotelladoras de gaseosas con sucursales en Estados Unidos.
Pero la trayectoria de Cartes no ha estado exenta de polémica.
Una comisión investigadora de la Cámara de Diputados de Brasil lo involucró con el contrabando de cigarrillos paraguayos al país vecino, informó el diario Abc.
Según un cable diplomático divulgado por WikiLeaks, del 5 de enero del 2010, Cartes fue investigado por Estados Unidos por el lavado de dólares a través "de medios ilícitos", incluyendo la venta de drogas desde la Triple Frontera al país norteamericano.
Ademas, en documentos publicados por La Nación, se lo asoció con el capo paraguayo-brasileño Fadh Yamil, quien le vendió más de 12.000 hectáreas en los departamentos de Amambay y Canindeyú, en el noreste del país, fronterizo con Brasil.
Yamil admitió recientemente ser cliente de un banco de Cartes.
La prensa paraguaya también señaló que la agencia antinarcóticos incautó en el año 2000 más de 300 kilos de marihuana y 20 kilos de cocaína de un avión que aterrizó en una hacienda de Cartes.
Por otra parte, una investigación publicada esta semana por el diario ABC lo acusa de haber abierto una entidad 'offshore' en el paraíso fiscal de las Islas Cook a través de su Banco Amambay.
Cartes niega tajantemente las acusaciones. "Si tienen pruebas que procedan", dijo en alusión a sus rivales liberales a los que este domingo derrotó en las urnas.
Durante la campaña electoral, sus detractores también recordaron que el empresario pasó tres meses en prisión, en 1985, acusado de una millonaria evasión de divisas, cargo del que fue finalmente sobreseído en 2002.
Cartes, uno de los principales contribuyentes del fisco paraguayo, afirma estar en regla con sus obligaciones.
Nacido en Asunción el 5 de julio de 1956, es el tercero de cuatro hermanos. Su padre, representante de Cessna en Paraguay y piloto del general Andrés Rodríguez que derrocó a Stroessner, lo impulsó a especializarse en motores de aviación en Estados Unidos, donde obtuvo diplomas técnicos tras terminar sus estudios secundarios en el colegio alemán Goethe de Asunción.
En 1975 ya estaba de regreso en el país para dedicarse de lleno a la actividad empresarial.
Fumador, amante del buen vino y señalado como uno de los solteros más codiciados del país, Cartes está separado de su esposa, María Montaña, madre de sus tres hijos, y vive en una sobria mansión en el exclusivo barrio Carmelitas de Asunción.
"Por mi finado padre, mis tres hijos, les voy a decir que no los voy a defraudar. Sí, se puede, se puede un país mejor", prometió, vestido informalmente con ropas de marca, como suele aparecer, al cerrar su campaña electoral el jueves entre hurras y fuegos artificiales.
AFP