En 2010, los hoteleros dejaron de aceptar tarjetas de crédito por dos semanas y luego hicieron una denuncia en la Comisión de Defensa de la Competencia contra las tarjetas.
Los hoteleros buscaban una mejora arancelaria ya que los que les cobraban las tarjetas oscilaban entre el 5 y el 7% por cada transacción y ellos pretendían un arancel conjunto del 3% y una mejora en el ciclo de pago. También la empresa Colonia Express denunció que por haber realizado una promoción con pago en efectivo sufrió la represalia de las tarjetas que le cancelaron los servicios.
La Comisión de Defensa de la Competencia del Ministerio de Economía les dio la razón a los denunciantes, pero un año después el Banco Central se declaró competente en el caso y decidió archivar la causa.
Javier Gomensoro, comisionado de Defensa de la Competencia, dijo que el Banco Central no llegó a una conclusión definitiva por "carencias propias de una infraestructura que no tiene en materia de defensa de la competencia". "No llegó a una conclusión definitiva que pudiera responsabilizar a esta agremiación de tarjetas, pero nosotros lo vimos claro en su momento, era una práctica anticompetitiva. En la denuncia se planteó que las tarjetas de crédito actuaban de manera corporativa, impidiendo descuentos por pago contado y retirando a quienes lo hacían todas las tarjetas del sistema. La comisión entendió que esta era una actividad colusiva, ilegal, corporativa a través de una agremiación, impidiendo la competencia, tanto de un medio de pago como de la posibilidad de que el que pagaba con efectivo gozara de un descuento que el comercio tiene porque las tarjetas le cobran comisión y diferimiento del pago", explicó.
La Comisión de Defensa de la Competencia funciona en la órbita del Ministerio de Economía y Finanzas. Fue creada por la ley 18.159 y es el organismo que "tiene por objeto fomentar el bienestar de los actuales y futuros consumidores y usuarios, a través de la promoción y defensa de la competencia, el estímulo a la eficiencia económica y la libertad e igualdad de condiciones de acceso de empresas y productos a los mercados".
El especialista en derecho comercial Julio Facal -redactor del proyecto que propone regular el mercado de tarjetas de crédito- dijo a No toquen nada que las funciones que estos temas exceden al Banco Central y por eso las decisiones deberían ser tomadas por organismos especializados.
En el proyecto de ley que hace un año está trancado en el Parlamento se propone una actuación conjunta del Banco Central y de la Comisión de Defensa de la Competencia. Facal, que trabajó en la redacción del proyecto, explicó que bajo esta regulación los contratos entre los sellos y los comercios deberían someterse a ambos organismos y por tanto no solo decidiría el Banco Central.