Cielo Salvaje comenzó a componerse durante el verano del 2012, pero las canciones tuvieron que archivarse para salir a la luz recién en setiembre del 2013. “Estuvimos con los temas en el freezer durante un año cuando por lo general componemos en dos o tres meses, cuatro a reventar”, contó a 180 Hugo Díaz guitarrista de la banda. En ese proceso de casi un año tenían alrededor de 25 canciones trabajando al mismo tiempo y “para nosotros era como tener 25 naranjas haciendo malabares en el aire”, agregó.
El disco se grabó en los estudios IN ZEN de la mano de Javier Longui. “Javier es un muchacho que trabaja con nosotros en los shows y nos dijo que le gustaría grabar un disco nuestro que sonara bien”, relató el vocalista Guillermo Peluffo. “Nos dijo que entendía que en vivo teníamos un sonido que no se transmitía en el estudio”, agregó.
“Cuando terminamos de grabar lo que era una prueba se convirtió en una grata sorpresa” dijo Peluffo. Grabaron 23 canciones en la prueba y volvieron para ajustar detalles de producción y composición, y grabar las 13 canciones definitivas que hoy integran Cielo Salvaje. El álbum se masterizó en Los Ángeles con Dave Collins y sus integrantes aseguraron que el resultado final es “rockero, pesado y vintage”, como a ellos les gusta.
En ocasiones, Trotsky fue catalogada como una “banda de tres acordes”. Sin embargo, Díaz en su rol de guitarrista aclaró: “no somos músicos muy virtuosos, pero los tres acordes hay que tocarlos. Hay que tocarlos y hacer que suenen”. A lo que Peluffo sumó que lo que más le interesa es hacer música popular, “que la gente la cante y la reconozca. Eso es música popular, la que te podés acordar de la letra y la podés cantar vos mismo. Y la música popular es simple, no es simple Trotsky, lo son todos los hits de música popular uruguaya. Acusar al rock and roll de ser simple es como acusar a la murga de pintarse la cara”, remató.
Disco nuevo, chiche nuevo
“Nosotros somos muy enamoradizos con los discos nuevos y muy crueles con los discos viejos”, confesó el guitarrista. “Cuando sacás un disco es como tener una novia nueva, estás absolutamente enamorado, la escuchás todo el tiempo, la mirás todo el tiempo y decís lo linda que es. Eso nos pasa con este disco”, explicó.
No es que los álbumes anteriores, que superan la decena, no tengan sus buenos temas sino que Trotsky Vengarán se define como una banda que tiene su fuerte en el vivo, arriba del escenario y por eso le dieron la razón a Longui cuando les propuso mejorar en estudio.
“A mí me pasa que cuando termino de grabar un disco digo: ahora sí puedo empezar a grabar el disco. Y esta vez lo hicimos, hicimos la prueba, ensayamos y después grabamos el definitivo”, contó el vocalista.
El nuevo disco es trabajo de Trotsky en todas sus letras y acordes, aunque cuenta con la participación de Gabriel Peluffo, hermano de Guillermo y cantante de Buitres, quien compuso el tema 1 de mayo. “Cuando me enfrenté a un cuaderno vacío le pedí ayuda a mi hermano, solo le corregí al tema algunas cosas para acercarlo más nuestro propio universo”, relató Guillermo.
Rock and roll es el género con que definen a este disco en el que se alejan un poco del punk y se influencian del rock más clásico. “Tenemos una manera de hacer canciones y de tocarlas que no la perdemos disco a disco, sino que nos llevamos un poquito hacia un lado o hacia el otro, y en este caso nos ensalzamos con un lado más serio de la banda”, mencionó Díaz. Las canciones mantienen su usual fuerza e ironía. “El disco está como crispado, suena pesado, con guitarra alta, batería alta y bajo también”, añadió Peluffo.
El título del álbum les llega sin darse cuenta. “En una de las canciones hay una frase, de un amigo que no escribe mucho pero cuando lo hace es glorioso”, relató Peluffo haciendo referencia a Hugo Díaz, “que decía: suben las apuestas y hay mucho que perder”. El vocalista le agregó un verso y el mensaje se convirtió en “no hay reglas bajo este cielo salvaje, suben las apuestas y hay mucho que perder”. Todos coincidieron en que era de las mejores frases de la banda en años.
Cielo salvaje resume el estado en que Trotsky ve al mundo de hoy. Héctor Souto, bajista de la banda, remarcó el nerviosismo con que vive la gente en la calle, la dificultad que tiene para disfrutar y “cómo se arrancan los ojos por llegar a algo que no existe”. Los cuatro integrantes de Trotsky se incluyen en esta situación. “Antes por lo menos existían las utopías que, si bien eran un verso, ordenaban la sociedad. Ahora no hay utopías, no hay religión, ¿qué te queda?, ¿el futbol?”, agregó Peluffo ironizando. “Tenemos la suerte de tener la banda y poder expresar estas cosas en las canciones”, concluyó Souto.
“Algunos joroban que parece el título de una novela venezolana”, confesó Díaz, “pero cuando escuchás la canción, que es de lo más pesado que hemos hecho, te genera como un clima denso, te lleva de la mano, te hace pasear por un lugar horrible y después te saca”, describió Peluffo.
El corte de difusión del álbum fue elegido por el sello discográfico Bizarro y es el tema más pop que tienen esta vez: En el final. “Cuando uno termina de armar el disco tiene cariño con determinadas canciones y piensa que son las que tienen que ir” explicó Díaz. “Pero como siempre, le erramos”, le siguió Peluffo.
El en vivo
Trotsky lleva más de 20 años arriba de los escenarios. “En los toques se mezclan personas que pegaron con la banda en distintos momentos de nuestra carrera. Hemos quebrado la barrera de edad y en los recitales no solo van jóvenes, sino gente de nuestra edad e incluso más grandes con sus hijos”, aseguró el vocalista.
En el marco de la gira Rock en ruta empiezan el 21 de setiembre en el Campus Municipal de Colonia, donde tocan junto con Buitres y bandas locales. Lo mismo el 22 de setiembre en la vieja estación de AFE, en San José. El tercer destino es la capital y se prevé una cuarta fecha en Melo por el mes de noviembre.
El 28 de setiembre se presentan en el Teatro de Verano. La puesta en escena es producida y diseñada por la propia banda. Los recitales son su fuerte. El escenario va a estar armado sin pantallas gigantes. “Nada de estar mirando la tele y basta de cosas raras, vamos a hacer un clásico recital de rock and roll”, concluyó Peluffo.
