Marina se inclinaría por Aécio Neves en balotaje ante Dilma

La candidata derrotada a la presidencia de Brasil, la ecologista Marina Silva, se apresta a apoyar al socialdemócrata Aecio Neves para derribar del poder a Dilma Rousseff y su Partido de los Trabajadores, en nombre del cambio que asegura el país necesita, informó la prensa brasileña.

Actualizado: 07 de octubre de 2014 —  Por: Redacción 180

Marina se inclinaría por Aécio Neves en balotaje ante Dilma

Sin datos (Todos los derechos reservados)

Los 22 millones de votos (21,3%) que la ecologista obtuvo en la primera vuelta del domingo serán claves para definir el cerrado balotaje del 26 de octubre entre Rousseff, del PT (izquierda), y Neves, del poderoso Partido de la Socialdemocracia Brasileña (PSDB, centro izquierda).

En vez de pedir cargos a cambio, como es tradición en la política brasileña, Marina Silva pretende que Neves incorpore y defienda algunos puntos claves de su programa, como el fin de la reelección presidencial, proyectos de sustentabilidad ambiental, un cambio en los criterios para atribuir el tiempo gratuito de propaganda electoral y el 10% del PIB para la educación, informó el diario O Globo.

Silva busca ser coherente de esta manera con su propuesta de una "nueva política" diferente a la del PT y el PSDB, que se han repartido el poder en los últimos 20 años.

El propio expresidente Fernando Henrique Cardoso, líder histórico del PSDB que gobernó Brasil de 1995 a 2002, ha estado en contacto con allegados a Marina Silva, según medios locales.

Ni la ecologista ni su equipo han confirmado oficialmente la decisión.

Divididos

El resultado de los comicios del domingo muestra que Brasil "claramente no concuerda con lo que hay" en el presente, se limitó a afirmar Marina Silva en la noche del domingo.

Los votantes de Silva, que no necesariamente tomarán el camino que señale la candidata, están divididos: de un lado, los que reclaman un cambio tras 12 años del PT en el poder, una economía en magro crecimiento hace cuatro años y escándalos de corrupción ligados incluso a la estatal Petrobras; del otro, quienes se sienten más cerca del PT por sus programas sociales que benefician a un cuarto de la población brasileña.

"Yo voy a ir por Aecio, porque ofrece un cambio en el gobierno, una mejora", dijo el profesor Elías Caires, de 42 años, a la AFP.

"Siempre voté PT, luché por el PT en la dictadura. Voté a Marina Silva porque estoy muy decepcionada con las denuncias de corrupción que enchastran al partido, pero nunca votaré por el PSDB, no puedo. Soy de izquierda, y me siento más cerca de Dilma", dijo Carmem Balcao, una empleada pública de 46 años.

Las encuestas indican que Neves podría captar 60% del voto de la ecologista.

"Es necesario que haya una señalización, el PSDB tiene que indicar cuál será su posición" sobre propuestas del programa de Silva, dijo Joao Paulo Capobianco, un cercano asesor de la ecologista, citado el martes por medios locales. "La evaluación es que no podemos tener otros cuatro años de este gobierno", indicó.

El Partido Socialista Brasileño, que nombró a Marina Silva como su candidata tras la muerte de su líder Eduardo Campos en agosto en un accidente de avión, reunirá el miércoles a su liderazgo en Brasilia para adoptar una decisión.

El hermano de Campos, Antonio Campos, dijo que votará a Aecio Neves.

Pero el partido, que integró la coalición de gobierno de Luiz Inacio Lula da Silva (PT, 2003-2010) y el de Rousseff hasta un año antes de las elecciones, duda entre apoyar a Neves o a Rousseff.

Todo es posible

"Hasta el 26, de momento, cualquier cosa es posible", estimó el experto en Latinoamérica Carlos Malamud, del Real Instituto Elcano.

El PT "tiene un piso muy sólido" con más del 40% de los votos en la primera vuelta, "y una estructura partidaria y una militancia capaz de grandes esfuerzos".

Pero sufre en tres frentes: la debilidad de la economía, los escándalos de corrupción y la equidad en tiempo de propaganda televisiva gratuita frente al PSDB en esta nueva etapa de la campaña, apuntó.

Neves también viene en ascenso. Los sondeos le pronosticaban un 26-27% en primera vuelta y cosechó 33,55%. Rousseff se estancó en los días previos al primer turno. Las encuestas le pronosticaban 44-46% y obtuvo 41,59%.

Malamud insiste en que los votos de Marina Silva y el apoyo del partido de centro PMDB, actual aliado del PT pero sin escrúpulos para abandonarlo si Neves se perfila ganador, serán claves para decidir la elección.