“No me voy, estoy llegando”

José Mujica se despidió de la Presidencia de la República en un acto en la Plaza Independencia. En su discurso, dirigido al “querido pueblo”, hizo un repaso de su vida y señaló que “si tuviera dos vidas, las gastaría enteras en ayudar tus luchas”. Además, dirigiéndose al pueblo exclamó: “no me voy, estoy llegando, me iré con el último aliento y donde esté, estaré contigo”.

Actualizado: 27 de febrero de 2015 —  Por: Redacción 180

Ante las miles de personas que llegaron a la Plaza Independencia este viernes para presenciar su despedida, el presidente José Mujica recibió el Pabellón Nacional, marcando su despedida de la Presidencia.

A continuación, Mujica realizó un discurso en el que repasó diversas etapas de su vida, desde la niñez hasta que llegó a la política.

“Querido pueblo, gracias por tus abrazos, tus críticas, tu cariño y sobre todo, por tu hondo compañerismo en cada una de las veces que me sentí solo en el medio de la Presidencia. Si tuviera dos vidas las gastaría enteras para ayudar tus luchas porque es la forma más grandiosa de querer la vida que he podido encontrar a lo largo de mis casi 80 años”, indicó Mujica.

El presidente cerró su alocución diciendo: “no me voy, estoy llegando. Me iré con el último aliento y donde esté, estaré por ti, estaré contigo, porque es la forma superior de estar con la vida. Gracias, querido pueblo”.

Anteriormente, Mujica dijo que no tenía sentido que contara en su discurso “la cantidad de gente pobre que ha mejorado su ingreso”, “la menor indigencia” o “los cables enterrados”. En cambio, siempre refiriéndose al pueblo en segunda persona, dijo que era “tiempo de agradecerte por el honor que me regalaste”.

Indicó que contaría “una historia similar a la de muchos otros”, y expresó etapas de su niñez, como cuando jugaba en “un barrio lejano donde morían las chacras”. “Era un tiempo de escuelitas siempre atestadas, con muchos gurises remendados, zapatillas rancheras y madres duras. ¡Qué cosa barbara, siempre le daban la razón a la maestra!”, expresó.

Habló sobre las idas a pescar durante su “huérfana niñez” y su adolescencia “cuando se callaban los cañones de la Segunda Guerra Mundial”.

Más adelante en el relato, remarcó la época en la que “empezábamos a dejar de ser la Suiza de América para ser definitivamente lationamericanos”, cuando “crecía dentro de nosotros el anhelo por un mundo más justo, sin que lo mío y lo tuyo nos separara”. Señaló que “nuestra democracia se empezó a enfermar porque no había nada para repartir” y que “caminábamos hacia la confrontación”.

Mujica agregó que mientras el mundo estaba en plena Guerra Fría, “nos terminamos jugando todo como muchos otros, sufrimos e hicimos sufrir y somos conscientes. Pagamos precios enormes pero seguimos por milagro vivos, templados y aprendiendo con la adversidad, habiendo repensado a toda la vida como una entrega y como valor para defender por encima de todas las cosas”.

A su vez, indicó: “al cabo de tanto trajín supimos que la lucha que se pierde es la que se abandona pero también hay que saber que no hay ningún final sino el camino mismo”.

Noticias relacionadas