Aguerre: pasar del verbo regar a la práctica de regar

Capitalizar el excedente de agua de las lluvias y desarrollar sistemas de riego es una prioridad de Tabaré Aguerre al frente del Ministerio de Agricultura. En un país donde “llueve bien, pero muy mal distribuido”, propone “salir de la lógica del factor para ir a la lógica del insumo”.

Actualizado: 07 de abril de 2015 —  Por: Redacción 180

Aguerre: pasar del verbo regar a la práctica de regar

adhoc/Pablo Vignali

El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Tabaré Aguerre, dedicó su discurso en la Expo Activa de Soriano a hablar sobre el riego, un tema que es recurrente en sus exposiciones como ministro.

“Esta es la sexta Expo Activa a la que vengo como ministro y es la cuarta vez que voy a hablar de riego. Yo dije cuando asumí como ministro que la única razón poderosa que me llevaba a continuar en la función era poder pasar del verbo regar a la práctica de regar”, indicó Aguerre.

El ministerio cuenta con un proyecto de ley que pondrá el tema arriba de la mesa nuevamente, ya que en su anterior período en la cartera la iniciativa quedó en observación y no llegó al Parlamento. En esta ocasión se presenta con modificaciones.  

“El agua en una agricultura sin riego no es un insumo. El agua es un factor. Es un factor de producción que está en la medida de que el suelo tenga capacidad de almacenamiento del agua y de que haya llovido. ¿Cuál podría haber sido el potencial de producción este verano si en las últimas tres semanas hubiéramos tenido 50 o 60 milímetros?”, se preguntó el ministro.

Aguerre dijo que la escasez de lluvia en estos primeros meses del año va a traer como resultado producciones por debajo de lo esperado. “Ojalá no sea muy grande la diferencia, pero estoy seguro por algunos cultivos que he recorrido que vamos a tener una producción muy lejos del potencial que expresaban los cultivos hace tres o cuatro semanas atrás”, manifestó.

Además, informó que en Uruguay llueve alrededor de 1300 milímetros de agua por año y que cuando miramos las estadísticas mundiales “somos un país donde llueve bien, pero llueve muy mal distribuido”. Tal es el caso de este año que llovió 500 mm en enero y no más de 28 mm en marzo.

“El problema es cómo hacemos para capitalizar ese excedente de agua, que termina en el Océano Atlántico con cero valor agregado y con cero valor de transformación en un insumo. Salir de la lógica del factor para ir a la lógica del insumo”, reafirmó Aguerre.

“El viernes pasado volé por el departamento de Artigas, íbamos con Enzo Benech, y yo le mostraba todas las represas que cuando yo empecé a hablar de este tema no existían, y todas las represas que hay construidas que se podían haber evitado haciendo dos represas grandes en las nacientes del arroyo Yucutujá o del arroyo Cuaró. ¿Por qué no se hicieron? Desde el punto de vista hidráulico están estudiadas pero los problemas de vecindad son muy difíciles de resolver cuando se trata de poner una firma juntos en algo que hay que amortizar en un montón de años”, consideró Aguerre.  

El ministro aseguró que “Uruguay tiene potencialidad geográfica y topográfica para el desarrollo del riego como pocos países en el mundo” gracias a la cantidad de cañadas, arroyos y ríos con la potencialidad de que tengan embalses integrarlos a sistemas productivos.

El rol del operador de riego

Aguerre consideró que “esa obra no la va a hacer ningún privado, no la va a hacer ni un vecino, ni dos, ni tres, las obras multiprediales son muy difíciles de hacer”.

“Imagínense la casuística que quieran, pero es muy difícil que en una cuenca donde hay 25 vecinos estén todos armoniosamente vinculados como para ponerle una firma común a algo que hay que amortizar en 25 años. Y por eso es que en la ley creamos el operador de riego, un individuo que viene, estudia, analiza, los visita y les dice ‘yo estoy en condiciones de darle el agua, puesta en este lugar vale tanto’. Y el señor en su derecho decide aceptar o no aceptar. Si acepta, ese padrón de aquí para adelante pasa a ser un padrón con derechos y obligaciones vinculados a ese sistema de riego; y el operador de riego tendrá un negocio económico y financiero, como el que tiene el peaje y arregla la carretera, o como el que tiene la concesión del puerto u otras cosas”, explicó.

De todos modos, para el ministro la solución no es que las represas las haga el Estado, sino “encontrar los marcos normativos y los diseños financieros que le den a los inversores y usuarios de riego las capacidades y potencialidades para que ese emprendimiento se haga”, sostuvo.

“Muchas veces nos han dicho que si promocionamos este tipo de obras, estamos promocionando que los ricos sean más ricos; si promocionamos este tipo de obras y los generamos como bienes públicos tal como hicimos con la trazabilidad, lo que generamos son oportunidades para los que por su escaso tamaño nunca podrían llegar a construirse una represa. No por el tamaño económico, por la ubicación topográfica. Si soy un lechero que tengo 500 hectáreas y estoy en la loma de la Cuchilla del Perdido nunca voy a poder tener mi fuente de agua si no participo en un sistema colectivo. Si es cierto lo que dice el ministro Aguerre y lo que dicen los números, que el agua es lo que cambia la competitividad, a la larga el que tenga el agua va a desplazar a ese que no tiene el agua”, afirmó Aguirre.

“El agua es vida, slogan número uno. El agua es un derecho humano. Y el agua es un bien público. Si nosotros nos planeamos desarrollar el riego sin comunicarle a la sociedad que le damos garantías de que no vamos a incumplir ninguna de las tres cosas que dije previamente no vamos a desarrollar nunca el riego”, concluyó el ministro.  

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