La estatua, de 21 metros de altura, representa al presidente de Turkmenistán en la cima de un peñasco, a lomos de su caballo favorito, Akkan, y con una paloma en la mano derecha.
El monumento recuerda al "Caballero de bronce", la estatua del emperador ruso Pedro el Grande en San Petersburgo.
Fundido en bronce y recubierto de capas de oro, se trata del primer monumento a la gloria de Berdymujamédov. Su predecesor, Saparmurat Niazov, ya mandó erigir una estatua de oro en su honor, giratoria, para que quedara siempre de cara al sol. Hoy está relegada en las afueras de Ashjabat, la capital del país.
Antiguo dentista, Gurbanguly Berdymujamedov alcanzó el poder en 2006 tras la muerte de Niazov. Este último fue objeto de un verdadero culto e incluso hizo renombrar los meses del año a partir de los nombres de sus familiares.
Durante la inauguración de la estatua, a la que el presidente no asistió, la presidenta del parlamento Akdja Nurberdieva afirmó que el monumento se había levantado a petición de "gente corriente, colectivos profesionales y organizaciones públicas".
Aunque Turkmenistán tiene una gran tradición ecuestre, se dice que "El jefe" -como se hace llamar Berdymujamédov- realizó la estatua para tapar una caída que sufrió hace dos años en un hipódromo, según indica La Vanguardia. Para que no se difundiera el hecho, se revisó las cámaras y computadoras a todos aquellos que quisieran salir del país tras el accidente. Sin embargo, las imágenes lograron filtrarse.
(AFP)