En uno de los centros comunales de Montevideo consultados por 180 ya se anotó una persona trans para participar.
En este caso se trata de una aspirante a Reina de Carnaval de 45 años.
Además, en ese centro hay otras 13 aspirantes registradas, todas menores de 26 años.
En otras zonas el ritmo de inscripción para el concurso es considerablemente más bajo que el del año pasado e incluso algunos centros comunales todavía no recibieron ninguna aspirante a reina de carnaval, llamadas o samba.
Espert "no representa" al Carnaval
El presidente de los Directores Asociados de Espectáculos Carnavalescos Populares de Uruguay (DAECPU), Enrique Espert, dijo esta semana en CX42 que "si quieren poner una reina trans, que hagan un concurso trans; si quieren hacer uno de putos, que hagan uno de putos".
"Y que no se olviden y hagan el de bufarrones, porque si no hay bufarrones, no hay maricas", agregó.
Ante estas declaraciones la Unión Trans emitió un comunicado denunciando la "transfobia" de Espert y pidió sus disculpas públicas. De lo contrario iniciarán acciones legales.
En el mismo sentido se expresó el Colectivo Ovejas Negras. "Repudiamos el tono y la forma despectiva de las declaraciones. Nos sorprende que una persona que se dice luchadora contra la opresión de la dictadura, caiga rápidamente en la agresión verbal hacia las mujeres trans, quienes a diario son oprimidas por una cultura machista, que las expone a la violencia basada en género", señala el comunicado.
Estos dichos de Espert "van en sentido contrario a la legislación vigente en nuestro país, entre otras, de la Ley Nº 18.620 de Derecho a la Identidad de Género", dice el texto.
Ovejas Negras también afirmó que estas declaraciones "son personales" y "no representan al conjunto de los artistas y agrupaciones de nuestro Carnaval".
Por último, la Coordinadora de la Diversidad, integrada por organizaciones como Cotidiano Mujer, la FEUU y Proderechos, comunicó su "total repudio a los dichos de Espert que claramente son de corte machista, clasista, transfóbicos y discriminatorios, atentando contra los derechos de participación social y cultural como ciudadanas y ciudadanos".
"No queremos más ni “referentes” culturales, políticos o medios de comunicación que sigan reproduciendo mecanismos y las lógicas de discriminación que atentan contra nuestros derechos y nuestra integridad como personas", dice el texto.