Ernesto Elenter, director y socio de la consultora especializada en temas energéticos SEG Ingeniería, contó en No Toquen Nada (Océano FM) algunas medidas que se pueden tomar para ahorrar energía.
“Nuestra propuesta es para las empresas que gastan mucho dinero en energía, no sólo eléctrica sino en gasoil, fuel oil”, comentó Elenter. Agregó que se cobra un porcentaje de lo ahorrado. En caso de no llegar al ahorro, no se les cobra nada.
Dijo que mirando la factura de UTE -considerando una global-
“se puede llegar al 20% de ahorro de energía”. En algunos casos, contó, llegaron a un 75% de ahorro.
Recordó que los clientes de UTE pueden solicitar un cambio en la factura de UTE. “A nivel residencial, hay dos tarifas. Yo diría que en términos generales, todo aquel que gaste más de 1.000 pesos por mes, es muy probable que le convenga pasarse a la tarifa doble horario residencial. Ahí se ahorrarían 300 pesos por mes sólo con el cambio de tarifa”, explicó.
Otros consejos
En el caso del calentamiento de agua, "lo primero que viene a la cabeza es la energía solar térmica, es decir, los clásicos paneles solares que en Uruguay no son tan clásicos", señaló Elenter. Con ese uso, se podría eliminar el 37% del costo por calentar agua, subrayó.
“Las bombitas incandescentes -las de filamento- son aparatos muy ineficientes. Se parecen más a una estufa que a una lámpara”, dijo Elenter. Indicó que si uno lo toca, se quema; y es por eso que conviene cambiarlas por lámparas de bajo consumo. “Tienen el mismo principio de funcionamiento, es una luz más fría y por lo tanto más eficiente. Cuando hay calor, hay desperdicio energético”, afirmó.
Si se cambia una lámpara de 75 vatios -en inglés, watts, en español vatios- por una de bajo consumo -que dé la misma luz y que consuma 15 vatios- se están ahorrando 100 pesos por mes. Es un buen negocio cambiar "esas lámparas que uno tiene en la puerta de la casa y están prendidas 12 horas por día”, ejemplificó.
Todo equipo que esté enchufado, algo de energía consume.
Hay tres estados posibles: encendido, apagado -stand by- y desenchufado. Sólo en la última opción no hay consumo de energía. "Entre el 5% y el 11% del consumo de la energía se debe a los aparatos que se encuentran en stand by", indicó.
En el caso del calefón, Elenter comentó que es un aparato que consume en referencia a lo que se gasta de agua caliente.
Comentó además, que los televisores planos, LCD, consumen menos energía que los comunes.
Posible normativa
El Senado le dio media sanción la semana pasada al proyecto de ley de eficiencia energética que incluye la obligación de etiquetar los electrodomésticos con la información sobre su consumo.
“Las etiquetas energéticas indican el grado de eficiencia y cuántos kilovatios/hora consumen por año”, detalló Elenter. “Eso permite a la persona hacer una elección fundada del equipo que está comprando”, agregó.
Lo que está previsto en la ley es que se aplique a los electrodomésticos que más consumen: iluminación, calefones, refrigeradores, motores eléctricos y lavarropas.