Ávila dijo en No toquen nada que hubo cuatro factores para que Keiko Fujimori, candidata del partido Fuerza Popular, perdiera una ventaja de hasta siete puntos que traía en las encuestas hasta hace dos semanas y quedara por debajo de su opositor, Pedro Pablo Kuczynski (PPK).
En primer lugar, el jefe de redacción de la Agencia France Presse en Perú indicó que en el último debate entre los candidatos, Kuczynski “dio el golpe, fue más agresivo”, siendo que se le había criticado durante su campaña su actitud tranquila y no combativa.
Agregó que al candidato del PPK (su fuerza política se llama Peruanos para el Kambio, haciendo coincidir su sigla con las iniciales del candidato) “le costaba mucho enfrentar a Fujimori en el debate, tanto así que cuando quería hacerle un ataque tenía que aprenderse el libreto y se veía que leía antes de atacarla, mientras que todas las propuestas las decía sin leer nada, a diferencia de Keiko que leía todo”.
El segundo factor fue un duro “golpe” que Kuczynski dio en el final del último debate. Ávila recordó que en 2011, durante la campaña política en la que fuera electo Ollanta Humala, PPK apoyaba a Keiko, algo que la hija del exmandatario Alberto Fujimori le recordó durante el primer debate de esta campaña.
Hay un poema peruano llamado “Cómo has cambiado, pelona”, de Nicomedes Santa Cruz, en el que el autor le reprocha a su novia cómo cambió luego que se fuera a trabajar a la casa de una familia rica. “Estos versos se usan mucho en Perú para referirse a alguien que te traiciona, que te da la espalda. En el primer debate, del 22 de mayo, al recordarle a PPK que él la apoyó en 2011, Keiko le dijo: ‘cómo has cambiado, pelona. Tú me apoyabas en 2011 y ahora me vienes a atacar’. Eso dejó a Kuczynski totalmente desarmado y después de eso empezó su caída”, contó.
Sin embargo, el 29 de mayo, durante el segundo y último debate, a PPK le tocó el cierre. “Terminó diciendo: ‘cómo has cambiado, pelona, me dijo. Yo le diría: tú no has cambiado, pelona, eres la misma’. Esto era como diciendo ‘tú me recuerdas a tu padre o sigues siendo lo mismo que tu padre’. Eso en verdad marcó en redes sociales y fue una picada final que Keiko no tuvo cómo responder”, comentó Ávila.
El tercer factor de la caída de Fujimori para Ávila fue el antifujimorismo existente en Perú, entendido como que “el 50% de la población no iba a dejar que Fujimori o su descendencia llegara al poder”. Esto se hizo más fuerte cuando la candidata de izquierda, Verónica Mendoza, que estaba fuera de competencia, salió a apoyar a PPK luego del segundo debate, siendo que él es de centro derecha.
Ávila dijo que más allá de las diferencias programáticas que pudieran existir entre PPK y Mendoza, la política “salió y dijo que era el momento de votar por Kuczynski”, pasándole su apoyo al candidato.
El cuarto factor que nombró el periodista fue una denuncia que golpeó al entorno de Keiko Fujimori, sobre todo, al secretario general de su partido, Joaquín Ramírez. Según contó Ávila, un informe de TV de Univisión señaló que la DEA (Administración para el Control de Drogas de EE.UU) estaba investigando a Ramírez por presunto lavado de activos. En el informe, salía un denunciante diciendo que Ramírez le había dicho que Keiko le había dado dinero para lavar durante la campaña de 2011.
“Esto generó un ‘sismo’ en Perú y los fujimoristas salieron a contener el ataque”, indicó Ávila, y añadió que dos días después, la DEA comunicó que no estaba investigando a Keiko Fujimori pero no dijo nada sobre Ramírez.
“Ahí comenzó un juego de tire y afloje que se terminó de romper cuando el candidato a la vicepresidencia de Keiko Fujimori, José Chlimper, llevó a un canal de televisión una grabación donde el supuesto denunciante se retractaba de la denuncia contra Ramírez. Lo emitieron al aire y hubo otro ‘terremoto’. Pero dos días después descubrieron que el audio había sido manipulado. El tipo no había dicho ‘es falsa la denuncia’ sino ‘no es falsa la denuncia, es cierto lo que está diciendo’ pero lo habían colocado al audio para hacerlo creer como que se estaba tirando para atrás”, relató el periodista.
Este evento complicó más la situación para el sector de Keiko, y Chlimper “debió desaparecer del mapa”, según Ávila, ausentándose incluso del habitual desayuno que tienen los candidatos antes de votar.
“Keiko estuvo rodeada solo de su familia, cuando en la primera vuelta había estado con todo su entorno político. Esta vez había quedado sola políticamente, sus escuderos más fuertes estaban derrotados”, comentó.