Larrañaga dijo a Astori durante la interpelación que “algunos de sus ‘éxitos’, para nosotros son un fracaso”.
El senador nacionalista le planteó al ministro que “está convocado porque es la cara de un proyecto que consideramos agotado, que está entrando en una peligrosa pendiente, barranca abajo”.
“Es al modelo al que venimos a interpelar”, señaló.
Larrañaga dijo que los ajustes que ha realizado el gobierno “son el reconocimiento de que no son un proyecto viable”. Además, agregó que la propuesta del Frente Amplio “no ha logrado satisfacer ni solucionar los grandes problemas nacionales: educación, trabajo, seguridad, salud, desarrollo del interior, inserción internacional, entre otros”.
“Han convivido y se han dejado ganar por los empujes populistas que ahora se precipitan por la confesa lucha de poder interna del Frente Amplio”, añadió el legislador.
Por su parte, el ministro Astori dijo que el 90% del presupuesto pactado “se va cumplir sin diferimiento” y que el gasto diferido será solo el restante 10%, unos 2.588 millones de pesos.
También dijo que el total del aumento de gasto endógeno para 2016 y 2017 es por 11.826 millones de pesos, que corresponde a “gasto predeterminado que no se puede modificar” y refiere a pasividades, seguros de desempleo, seguro por enfermedad y colectivos que ingresaron al Fonasa.
Astori explicó que los únicos aumentos de gastos en esta Rendición de Cuentas son el nuevo Código de Proceso Penal, la instrumentación del Código Aduanero y el cambio de régimen de trabajo en la Corte Electoral.
A su vez, dio que las medidas de ajuste harán mejorar las cuentas públicas en un punto porcentual del PBI (aproximadamente, 460 millones de dólares) y lo comparó con el ajuste realizado en 1990 por el gobierno de Luis Alberto Lacalle, que fue de 5,2%. “Eso sí es un ajuste muy grande”, dijo Astori.
El titular de la cartera de Economía y Finanzas remarcó que el déficit fiscal uruguayo, de 2,8% del PBI, es menor al de varios países de la región.