A los 32 minutos del partido entre Southampton y Leeds United en noviembre de 1996, Graeme Souness, técnico de los primeros, miró al banco y llamó a Aly Dia para que debutara en la Premier League, reemplazando al ídolo Matt Le Tissier, que se había lesionado.
A los 85 minutos, Dia salió, habiendo decepcionado al entrenador y a la afición. Al día siguiente no fue a entrenar y nunca más se supo de él en los Saints.
Había llegado unas semanas antes al club, habiendo declarado jugar 13 partidos para la selección de Senegal y con la recomendación de una estrella mundial. George Weah, Balón de Oro de 1995, había llamado al DT Souness para apoyar la contratación de Dia, diciendo que era su primo y lo conocía bien.
Sin embargo, con el tiempo se supo que no era primo de Weah, quien no había llamado a Souness, que tampoco había jugado en la selección senegalesa y que no tenía la experiencia que se adjudicaba, por ejemplo, haber jugado en el Paris Saint Germain, entre otros.
Dia se convirtió en una leyenda en Inglaterra, vendiéndose hasta el día de hoy camisetas con su nombre, pero ningún medio lo pudo contactar hasta ahora que el sitio Bleacher Report dio con él.
El senegalés declaró a ese medio haber jugado en algunos equipos de Finlandia, Francia y Alemania y haber estado en la reserva del PSG. Dejó el fútbol poco tiempo después la experiencia en Southampton y estudió una maestría en administración de empresas en la Universidad de San Francisco State de EE.UU.
Añadió que estos años habían sido muy dolorosos, que vivió un tiempo en Catar trabajando en distintos negocios y actualmente vive en Londres, donde busca empezar una vida nueva, sin que se recuerde su infame pasaje por el fútbol de élite.
A raíz del artículo de Bleacher Report, en el que la periodista Kelly Naqi viajó a Senegal y visitó la casa de sus padres, Dia fue franco sobre su pasado por primera vez en 20 años y confesó a sus padres e hijo qué había sucedido.