Oscar Parrilli está acusado por la justicia de ocultar información de contrainteligencia que confirmaba datos sobre el paradero Ibar Pérez Corradi en Paraguay, buscado en ese momento por tráfico de efedrina y por un triple asesinato cometido en 2008.
Pérez Corradi estaba prófugo desde hacía cuatro años y se entregó en 2016 cuando asumió como presidente Mauricio Macri.
Para procesar a Parrilli, el juez Ariel Lijo se valió de las declaraciones de testigos, de otros imputados y también de escuchas telefónicas realizadas durante 60 días sobre el teléfono del ex funcionario.
En esas llamadas Parrilli aparece hablando, entre otros, con la ex presidenta Cristina Fernández, que lo llama “pelotudo” y le pide que vaya a trabajar.
Mauricio • Ahora
Parrilli pidió la recusación del juez de la causa por "enemistad manifiesta" a raíz de que estas escuchas se filtraron a la prensa.
“La morsa”
El ex jefe de gabinete de Cristina Fernández, Aníbal Fernández, fue acusado de ser el autor intelectual del triple crimen de la efedrina por el autor material de los asesinatos, Martín Lanatta, que fue entrevistado en el programa del periodista Jorge Lanata a siete días de las PASO, las internas para definir candidatos en Argentina.
Para este hombre la orden de matar a estas tres personas la dio “la Morsa”, que era Aníbal Fernández y no Pérez Corradi.
