La nota publicada este miércoles por The Washington Post plantea que si bien el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha recibido acusaciones de fascista, “la democracia no parece amenazada” bajo su régimen, a pesar de tener el apoyo de los neonazis norteamericanos.
“El caudillo estadounidense no lidera una dictadura totalitaria, ni siquiera una incipiente. Aunque su estilo tiene muchas cosas en común con los líderes fascistas del período entre guerras, su práctica se parece más a los fundadores latinoamericanos del populismo moderno, especialmente al general Juan Domingo Perón”, dice el artículo firmado por A. Dirk Moses, Federico Finchelstein y Pablo Piccato.
Entre las similitudes que encuentran entre Trump y Perón están que el poder se engloba totalmente en una sola figura que encarna al pueblo y sus necesidades que han pasado desatendidas.
Indican que Perón planteó en sus discursos de campaña de 1945 que la política era una guerra entre lo que verdaderamente le pasaba al pueblo argentino, que él encarnaba, y los enemigos del pueblo, tanto domésticos como extranjeros. Además, acusó a Estados Unidos de apoyar a la oligarquía y la clase política tradicional contra él y la gente, posturas muy similares a las que tomó Trump en campaña y que plasmó en su discurso inaugural.
Otro punto de contacto que notan los autores es que el peronismo colocaba pósters que leían: “Braden o Perón”, en referencia a Spruille Braden, embajador de EE.UU en Argentina como una representación de la idea que el poder exterior debe ser detenido para que no oprima al pueblo del país.
El artículo incluso llama a Trump “un peronista populista por naturaleza” que está más interesado en permanecer en la oficina gracias al cariño de sus seguidores más que intimidando a la oposición con medidas puntuales, lo que lo aleja del fascismo.