“Víctor, venite para el Palacio que tenemos que hablar contigo”. Púa entendió enseguida el mensaje que le dio por teléfono el presidente Juan Pedro Damiani. El DT no quería dirigir al plantel superior. Ya se lo había manifestado a Damiani cuando este le pidió que asumiera durante un tiempo. No le parecía correcto para nadie. Pero es empleado del club y otra no le quedaba. Peñarol sigue sin técnico y el fin de semana se acerca, por lo que mientras se dirigía a la sede aurinegra junto a su ayudante Claudio Listur iba pensando en que de nuevo, igual que cuando Daniel Passarella renunció a la selección y tuvo que tomar al equipo, debía asumir en Primera.
Púa dirigirá al equipo, por lo menos, hasta después de la detención del Apertura por las Eliminatorias. Allí los dirigentes tendrán 15 días para buscar un nuevo DT. Es que la contratación de Bengoechea no se concretó. A pesar de que el lunes, dos dirigentes de Peñarol le dijeron a 180 que el riverense había aceptado, los hechos demostraron lo contrario. La gran diferencia fue deportiva. Al ex volante no le seducía dirigir un plantel que tiene, desde su punto de vista, varios puntos débiles. Sobre todo adelante. “Me dijo que faltan delanteros”, expresó un consejero a 180. A pesar de esa realidad, en Peñarol se creía que igual iba a tomar el equipo. Pero la realidad fue distinta y Bengoechea no asumirá. El tema no fue ni el económico ni su falta de título. A Bengoechea se le debe mucha plata desde que era jugador y nunca reclamó mientras que a los directivos, a pesar de lo que dijeron en cuanto a su preocupación porque no podía entrar a la cancha, poco les importaba que ingresara o no al terreno. Además, cuando lo fueron a buscar, ya sabían que no tenía título de técnico.
Damiani llamó por la tarde al presidente de Racing, Raúl Rodríguez, y le comunicó que en caso de que no se concretara lo de Bengoechea, iba a intentar contratar al actual entrenador de la Escuelita, Juan Verzeri. Pero no son pocos los que piensan en esperar para ver cómo se dan las cosas. Por lo bajo dicen “y si Púa gana todos los partidos, ¿lo sacamos igual?”.