Domínguez cargó otra vez contra la empresa Global Sports y su dueño, Francisco Casal. En una nota publicada en la web oficial de la CONMEBOL, catalogó a Casal como uno de los “personajes aferrados a las viejas y oscuras prácticas” y recordó que su empresa no cumplió el contrato que la vinculaba a la CONMEBOL. Por eso, dijo, “CONMEBOL ha demandado por incumplimiento de contrato por la suma de 10 millones de dólares mas intereses ante el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS)”.
Domínguez evaluó como “muy extraño” que “en paralelo” Ismael Antonio Pintos “un personaje de la vieja guardia de Nicolás Leóz, demande a la CONMEBOL aproximadamente por 10.5 millones de dólares, aduciendo que él fue quien trajo el contrato de Global Sports a la Confederación en los tiempos de Léoz, y que bajo un supuesto acuerdo entre él y Léoz, que nadie conoce y que ni siquiera está documentado, la CONMEBOL le debe una comisión”.
Según la nota de la web oficial, CONMEBOL considera la denuncia como parte de una campaña coordinada y Domínguez dijo que “estas demandas injustificadas no son más que extorsiones”.
“El 10 de julio de 2017, luego de que un Juzgado de Primera Instancia en lo Laboral de Luque falló a favor del señor Pintos tan solo 3 días después de la presentación de los alegatos, una celeridad inédita para la justicia paraguaya, la CONMEBOL apeló el extraño fallo y denunció a los tres magistrados que lo emitieron ante el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados. La CONMEBOL continuará su defensa de la demanda al considerarla injustificada, descomedida y viciada con irregularidades procesales”, anuncia la nota.
Domínguez también denunció a “otro personaje de la vieja guardia de Léoz que se llama Dario Goes” quien también demandó a CONMEBOL en los últimos días. “Mi administración rompió vínculos en enero de 2016 y está siendo investigado por la Comisión de Ética por una denuncia formulada por clubes de la Confederación Brasilera de Fútbol (CBF) quienes alegaron que este señor supuestamente se hizo pasar por representante de la CONMEBOL y emitió documentos contables no válidos cobrando miles de dólares en efectivo a los clubes brasileros por supuestos trámites logísticos relacionados con nuestros torneos continentales”, declaró Domínguez.
En la nota se resalta que la nueva administración de la Conmebol contrató a Quinn Emanuel “reconocida firma anti-corrupción” para investigar el período 2000-2015 y encargó una auditoría forense realizada por Ernst & Young.
“Tras meses de trabajo, el 27 de abril de 2017, la CONMEBOL remitió los hallazgos de esa investigación interna al Departamento de Justicia de los Estados Unidos y a la Fiscalía de Paraguay, entre los cuales se destacan (i) más de USD 26 millones en pagos irregulares a Nicolás Léoz o entidades por él controladas, (ii) más de USD 58 millones en transacciones a favor de terceros sin el debido soporte documental, y (iii) más de USD 33 millones en transferencias a cuentas no identificadas”, cuenta la nota que agrega que la investigación se compartió con la Fiscalía norteamericana, suiza, uruguaya y boliviana.
