“No podemos decir cuándo murió la víctima”

Jueces, fiscales y abogados: todos quieren saber cuándo murió la víctima. “Llegó el momento de que dejen de preguntar”, dijo Fernando Verdú Pascual, Profesor de Medicina Legal y Forense y Ética Médica de la Universitat de València.

Actualizado: 05 de noviembre de 2017 —  Por: Emiliano Zecca

“No podemos decir cuándo murió la víctima”

Foto: Universitat de Valencia/s.d (Todos los derechos reservados)

El profesor Verdú Pascual dio una conferencia en Uruguay en el marco de los 140 años de la fundación de la Cátedra de Medicina Legal y Ciencias Forenses uruguayas.

Verdú ya había estado en los 125 años de la cátedra y en ese momento hablaba de un problema de la profesión que se mantiene hasta hoy: los forenses que creen poder decir el momento exacto en que murió una persona.

“Lo que todos los operadores jurídicos quieren saber: ¿cuándo murió? Los jueces, fiscales y abogados nos siguen preguntando cuándo murió. Y nosotros no lo podemos decir, no tenemos absolutamente ningún instrumento que nos permita saberlo y ha llegado el momento de que las personas encargadas de la administración de justicia dejen de preguntar a los médicos forenses cuándo murió”, sostuvo.

Verdú reconoce que hay muchas investigaciones y literatura con técnicas y novedades para determinar el tiempo exacto de muerte. Pero después aclaró que “está la triste realidad”.

“Los japoneses y los chinos, fundamentalmente, son extraordinarios para analizar una serie de parámetros que después no pueden aplicarse y no sirven absolutamente para nada. Pero salen publicados en las revistas y ese es el objetivo, haciendo creer a la sociedad, que sería el mal menor, y a los operadores jurídicos, que ese sí es el mal mayor, que la medicina forense tiene respuesta para este problema. Esa pregunta no tiene respuesta y no pasa nada con que no la tenga, no es ningún desdoro para nuestra profesión, si siempre nos hemos acostumbrado a decir cosas que en el fondo no responden a la realidad porque en muchas ocasiones nos inventamos el momento de la muerte, permítanme la expresión. Yo creo que sería momento de que la medicina forense empiece a eliminar de las conclusiones el establecer cuándo se produjo la muerte cuando se hace una autopsia”, dijo.

Nisman murió el domingo a las 2:46

“El peritaje de la Gendarmería Nacional sobre la muerte del fiscal de la causa AMIA Alberto Nisman sostiene que el fallecimiento se produjo a las 2:46 del domingo 18 de enero de 2015”, dice una nota de Infobae que fue citada por Verdú.

“Yo me hubiera fiado si decían más/menos 33 segundos. Así era más fiable, sencillamente. No existe posibilidad de dar la data de la muerte y los que están encargados de preguntar, no pregunten esto, esa es otra posibilidad. Pregúntenle a la policía que esa sí tiene el tiempo real de muerte y ahí sí se pueden seguir haciendo todas las investigaciones”, afirmó el profesor.

Verdú dijo que lo único “seguro y correcto” es el tiempo real de muerte, que refiere al lapso de tiempo entre que la víctima fue vista por última vez y cuando fue encontrado muerto.

“Entonces, ¿qué vamos a hacer nosotros los forenses? Vamos a seguir trabajando y haciendo bien las cosas, de forma constante. Anotando todas las cosas, la temperatura, grados de putrefacción, todo. Y cuando llegue el momento de decir las conclusiones nosotros nos quedamos calladitos y no decimos cuándo se produjo la muerte. Pero tenemos todos los datos, hemos hecho las cosas perfectamente, y es la policía la única que tiene que intervenir, son los únicos que tienen que establecer el tiempo real de muerte, en ese espacio seguro que se ha muerto, no hay duda. Y con ese dato los instructores del proceso pueden dirigir su investigación a un grupo de personas, que si le hacen caso al forense, se ve reducido enormemente. Así es como se hacen bien las cosas”, explicó.

Profesor ad honorem

Fernando Verdú Pascual es profesor de Medicina Legal y Forense y Ética Médica de la Universitat de València. Además, es director del Máster en Medicina Forense de esa universidad y, desde el 25 de octubre, también es profesor ad honorem de la Universidad de la República.