El ránking de los países con mayor cantidad de fallecidos en atentados terroristas lo encabeza Afganistán con 995 muertos y hay que ir al puesto 11 para encontrar un país Europeo: Turquía. Los anteriores son mayoría asiáticos y varios africanos. Estados Unidos es el número 13 con 71 fallecidos y entre los países que superan las 30 víctimas en 2017 también están Rusia, Portugal, Reino Unido y España.
El año comenzó con un atentado en Estambul, Turquía. Una persona vestida de Papá Noel entró a una discoteca y disparó a quemarropa, causando al menos 39 muertos y 70 heridos. El ataque se produjo el 1 de enero de a las 01.30 hora local.
En febrero, Pakistán fue víctima de un ataque suicida en una mezquita, provocando 90 muertos y más de 300 heridos. El atentado Fue reivindicado por el Estado Islámico.
El 22 de marzo fue el turno de Reino Unido, cuando un hombre apuñaló a un policía en el parlamento y un coche todoterreno embistió a un gran número de personas en el puente de Westminster. El atentado dejó seis muertos, cuatro en el puente y dos en el parlamento (incluyendo al perpetrador), y más de 50 heridos.
Abril comenzó con una explosión de un artefacto casero en el metro de San Petersburgo, con un saldo de 16 fallecidos y 64 heridos. Horas más tarde se llegó a encontrar otro artefacto explosivo que no llegó a detonar.
Luego, el 7 de abril, un camión atropelló a varios ciudadanos en el centro de Estocolmo, con cinco muertos y 14 heridos. El perpetrador es simpatizante del Estado Islámico, había solicitado la residencia en Suecia en 2014 y tenía una orden de deportación.
El 21 del mismo mes, 256 soldados afganos y más de 10 talibanes murieron, además de 160 que resultaron heridos, como consecuencia de un ataque a un campamento del Ejército Nacional Afgano.
En mayo, el atentado más impactante ocurrió en Manchester, cuando un suicida asesinó a 23 personas e hirió a 116 durante un concierto de la artista Ariana Grande en Reino Unido. La mayoría de las víctimas eran menores. El Estado Islámico reivindicó el atentado al mediodía del día siguiente.
Sin embargo, el más mortífero fue el de la embajada alemana de Kabul, Afganistán, cuando un camión bomba dejó más de 150 muertos y 460 heridos.
El ataque destacado de junio ocurrió el día 3, cuando un camión atropelló a varias personas en el puente de Londres y acto seguido tres atacantes se bajaron del mismo y apuñalaron a varias personas en el mercado de Borough, produciendo 11 muertos (incluyendo a los 3 perpetradores) y 48 heridos.
El 28 de julio, un hombre apuñaló a varias personas en un supermercado en la ciudad alemana de Hamburgo, causando un muerto y seis heridos.
En agosto, el día 17, tuvo lugar el doble atentado de las Ramblas de Barcelona y Cambrils, con un saldo de 16 muertos y más de 130 heridos en un atropellamiento masivo ejecutado por el Estado Islámico en La Rambla de Barcelona y otros 6 muertos (5 atacantes y un civil) y 5 heridos en Cambrils.
El 14 de setiembre, en Irak, al menos 83 personas mueren y más de 90 quedan heridas en un doble atentado terrorista con disparos a comensales de un restaurante y a un puesto de control de seguridad, con posterior detonación de dos coches bomba. El Estado Islámico se adjudicó la autoria de los ataques.
En octubre ocurrió el atentado más mortal del año: un doble atentado con camiones bomba en un hotel y un mercado en Mogadiscio, Somalia, con un saldo de alrededor de 512 muertos y más de 350 heridos. Es el peor atentado terrorista en la historia de ese país y el segundo desde el inicio del siglo XXI, solo detrás de los atentados del 11-S. Ningún grupo terrorista se ha adjudicado la masacre.
El 31 de ese mes, una furgoneta embiste a una multitud al sur de Manhattan, cerca del World Trade Center, en en Nueva York. Causa ocho muertos, entre ellos cinco argentinos, y 12 heridos.
El 24 de noviembre, un atentado terrorista con explosiones de bombas y un posterior tiroteo masivo a quienes huían de las bombas en una mezquita dejó alrededor de 311 muertos y más de 100 heridos.
El 27 de diciembre, una bomba casera estalló en un supermercado de San Petersburgo y dejó 10 heridos, mientras que al día siguiente, en Afganistán, 42 personas murieron y más de 80 resultaron heridos en un atentado suicida perpetrado por el Estado Islámico contra un centro cultural chiíta en Kabul.