La estatua es obra de un colectivo anarquista de la costa oeste de Estados Unidos que creó una serie de cinco ejemplares, bautizada como "El emperador no tiene pelotas", y se cree que la pieza subastada es la única que no fue confiscada o destruida.
Las cinco creaciones se colocaron en lugares públicos de Los Ángeles, San Francisco, Nueva York, Seattle y Cleveland, en agosto de 2016, en plena campaña presidencial de Trump, lo que despertó el interés internacional.
La única estatua que aguantó fue recuperada por La Luz de Jesus Gallery, en Hollywood, antes de que fuera derribada, y ahora su propietario, Zak Bagans, la mostrará en su Haunted Museum, en Las Vegas, según informó Julien's.
AFP