El comunicado de la productora que anuncia el estreno afirma que “con sensibilidad y belleza, Kusturica explora, en estas escenas, las convicciones ideológicas de Mujica, que se traducen en coherencia política y en una vida personal simple y austera”.
El documental se empezó a rodar en abril de 2013 con el primero de varios viajes del cineasta y músico serbio a Uruguay. Con un registro de su vida pública y privada, que incluyen los últimos días de Mujica en la Presidencia, la película retrata “el presente político, los cambios en el mundo global, la sustentabilidad, la militancia, el amor” en conversaciones entre el político y el realizador.
Como un sello de su carrera política, Mujica “abre su mundo más íntimo, desde su experiencia transformadora en la cárcel como preso de la dictadura, hasta su tareas cotidianas en la chacra”, agrega el comunicado.
El texto agrega que “más que una película biográfica, 'El Pepe: una vida suprema' captura la cosmovisión del mundo de un político ejemplar en el momento crucial en el que se aleja del poder y se construye su legado”.
Kusturika ha dicho que decidió hacer la película porque “a través de su trayectoria de vida y de su ejemplo personal, Jose Mujica transmite esperanza en la concreción de los ideales”. Además, “el amor de Mujica por la vida y la naturaleza está en el corazón de su ideología. Impresionado por él y por su trabajo, y también triste por no haber tenido un presidente como él, decidí hacer esta película, celebrando la virtud y la posibilidad de una utopía”, afirmó.