Amsterdam, Rotterdam, La Haya, Maastricht o Arnhem eran algunas de las numerosas ciudades voluntarias para organizar el evento tras la victoria del joven cantante, que trajo a su país su primera victoria en 44 años, con una balada inspirada en la desaparición de un ser querido.
La canción de Laurence, favorita en los pronósticos, llegó tercera en la votación del jurado de profesionales. Pero se impuso finalmente gracias a los votos de los telespectadores.
"Estamos orgullosos de Duncan Laurence que ha conquistado Europa con clase musical (...) y trajo para el año próximo Eurovisión a nuestro país" se congratularon en Twitter el rey y la reina de Holanda.
Laurence, de 25 años –Duncan de Moor es su verdadero nombre– era relativamente desconocido en Holanda antes de ser elegido para representar al país en Eurovisión, donde los holandeses no triunfaban desde 1975.
"Mi sueño se hizo realidad", dijo ante la prensa, poco después de su victoria. "¡Estupendo!", reaccionó el primer ministro holandés, Mark Rutte.
"Menuda actuación de @dunclaurence, que logró mantener su posición de favorito con una presentación sublime y poderosa", agregó Rutte.
Here's another recap of all of tonight's 26 Grand Final performances!
— Eurovision (@Eurovision) 18 de mayo de 2019
Who will you be voting for?#DareToDream #Eurovision pic.twitter.com/MIx33EsCzr
El concurso, transmitido en directo desde Tel Aviv fue seguido masivamente por los holandeses.
En promedio, atrajo a 4,4 millones de telespectadores en Holanda, con un tope de 4,6 millones en el momento del anuncio final, es decir con 80% de los holandeses ante sus televisores viendo Eurovisión en ese momento, según datos de Avrotros.
(AFP)