La denuncia es contra dos enfermeros, acusados de abusar sexualmente de una mujer privada de libertad, ya que a cambio de sexo oral le entregaban psicofármacos y alcohol en gel.
En un comunicado, ASSE explicó que las opiniones de Suárez no reflejaban la opinión de la institución.
Suárez declaró en el programa Las cosas en su sitio, de Radio Sarandí, que en este caso “no se plantea una denuncia de abuso sexual, porque lo que se plantea es una relación consentida para favorecer el ingreso de medicamentos y otras cosas”.
El caso investigado involucra a la Unidad 9 del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), donde están alojadas las mujeres privadas de libertad que viven con sus hijas e hijos. La fiscal Sylvia Lovesio, de la Fiscalía de Delitos Sexuales de cuarto turno, también tomó el caso.