Vos sí, vos No

Ante una antología, la pregunta es siempre la misma: ¿con qué criterio se selecciona a los autores y a las obras que la integran? Imitando un reflejo, la pecosa dramaturga, poeta, actriz, directora teatral y gestora cultural concentrada en el apellido de la Fuente resuelve la tediosa y cíclica cuestión desde Antología de Poesía Portuguesa Contemporánea, el libro que traduce y compila.

Actualizado: 17 de noviembre de 2009 —  Por: Miguel Ángel Dobrich

Vos sí, vos No

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Como indica la contratapa de la Antología de Poesía Portuguesa Contemporánea, el pequeño e inabarcable objeto literario de Estuario Editora se astilla en zonas temáticas: la reflexión sobre la creación poética y la importancia de la palabra, la poesía amatoria, el pensamiento profundo sobre el individuo y la sociedad, la unidad, la pluralidad y la fragmentación del yo, la noción de realidad y la extrañeza de la existencia, y la meditación acerca del ser portugués. La antología fue organizada originalmente para un recital en vivo. Hoy puede ser actualizada o escuchada internamente por todo aquel que esté dispuesto a enfrentarse a instancias de belleza que son presentadas simultáneamente en español y portugués.

Lejos del fado y ante la leve vibración de una fuente de PC, Isabel de la Fuente chateó con 180.

Como traductora, ¿cuál fue el máximo desafío de este proyecto?

El gran desafío fue el proyecto en sí, desde el momento en que empezamos junto a Raquel Carinhas a preparar el recital. Ella me puso en contacto con muchos poetas que yo aún no conocía, y entonces ya desde el vamos se plantea un desafío particular que es el de sumergirse raudamente en la obra de un poeta para luego sólo quedarse con uno o dos poemas, y eso: ¿cuáles poemas? Pero claro, después llegan los desafíos más sutiles y por cierto los más ricos: el desafío de una palabra, de una expresión, del ritmo y de la métrica. El desafío del criterio a seguir. Por ejemplo en el caso de los dos sonetos de Manuel Alegre, opté por sacrificar la perfecta medida de algún verso a favor del sentido y la musicalidad de las palabras (Puristas: ¡perdonadme!). Y siempre la duda… uno seguiría traduciendo el mismo poema una y otra vez, en el intento de superar la versión anterior, de encontrar la palabra más apropiada… Y quién sabe si el resultado acabará siendo mejor o peor. Por suerte estos procesos tienen sus plazos: la fecha del recital, o la entrada a imprenta y el sufrimiento del editor que ya no sabe –valga la expresión para este caso– en qué idioma pedir que se le entregue el material.

¿Por qué has optado por no traducir “saudade”? Es la única palabra portuguesa que permanece intacta en el libro.

En realidad he optado por seguir el criterio usado ya por diversos traductores del portugués, según el mismo: se prefiere incorporar la palabra saudade a nuestra lengua, en el entendido de que ésta carece de una palabra que refleje cabalmente el complejo significado de saudade, que además es por sobre todas las cosas un concepto fundamental en la ideología del pueblo portugués. Es con amor y placer: añorar, extrañar, recordar. Es nostalgia, es sentir la falta, la ausencia. Y es asimismo el dolor de la vivencia esos sentimientos, pero no sólo...

Según el Dicionário Priberam da Língua Portuguesa:

Saudade s. f.

1. Lembrança grata de pessoa ausente ou de alguma coisa de que nos vemos privados.

2. Pesar, mágoa que essa privação nos causa.

Entonces cómo traducir ese concepto al español sin podarle su sentido, cuando no es sólo nostalgia, añoranza, ausencia...

¿Qué rasgos destacarías de la poesía portuguesa en relación a poéticas de otras naciones?

La profunda reflexión sobre el creador y su lugar en el arte y en la sociedad.

¿Quién faltó? ¿Qué gran autor portugués quedó por fuera?

Ruy Belo fue el único autor que estuve manejando y finalmente dejé fuera, a pesar de su bellísima poesía, ya que por el tipo de estructura poética de su obra –poemas largos y de gran densidad– se me hizo imposible incluirlo en el recital origen de esta antología. Luego por cierto quedaron fuera muchos otros y preferiría no nombrarlos para así evitar el riesgo de olvidar dos veces. Citando a Lezama Lima: “no hay lista y yo no estoy lista para hacer la lista”.

¿Coincides con Borges en que la traducción es una etapa más avanzada de la escritura?

Cito algunos fragmentos del texto donde aparece la afirmación que citas, ya que creo que la misma fuera de contexto puede generar una comprensión errónea, o al menos incompleta de la idea manejada por Borges. Podemos correr el albur de pensar que lo de “más avanzada” refiere a una jerarquía, a niveles de relevancia del acto de escribir, y me inclino a interpretar que la cosa no va por ahí y en todo caso: si fuese por ahí no estaría de acuerdo.

“El original no es fiel a la traducción”.

“La traducción es una tarea delicada, por sobre todo humilde, melancólica; un proceso riguroso, un ejercicio espiritual; una forma amorosa del entendimiento; un manipuleo suntuoso de los misterios; una toma de conciencia; una compulsa de ritmos; una aventura del espíritu”.

“Quizá el oficio del traductor es más sutil, más civilizado que el de escribir: es obvio que el traductor viene después del escritor. La traducción es una etapa más avanzada”.

Y sí estoy plenamente de acuerdo con la idea de trabajo humilde y sutil, del riesgo y la aventura que significa enfrentarse a un texto para regalarle otra lengua. Y por sobre todo con aquello de “una forma amorosa del entendimiento”.

¿Qué ganas como escritora ante un desafío como el de la antología?

La hondura de caminar debajo de la piel de la poesía.

Abandonemos la entrevista como corresponde, deja tu verso preferido.

oh subalimentados del sueño!

la poesía es para comer.

(La Defensa del Poeta – Natália Correia)

“No escriban, traduzcan, y así podrán ganarse la vida honradamente”, solía aconsejar Stendhal a las mujeres. La Antología de Poesía Portuguesa Contemporánea respeta e ignora tal estupidez ofreciendo versos de Lídia Jorge, Sophia de Mello Breyner Andresen y Natália Correia. Pero eso no es todo. El libro compila poemas de Manuel Alegre, António Botto, José Luís Peixoto, Fernando Pessona (y sus heterónimos), Alexandre O’Neill y Nuno Júdice, entre tantos otros.

Antología de Poesía Portuguesa Contemporánea

Estuario Editora

142 páginas