Vanidad, ortodoxia y falta de diálogo, las críticas del Frente Amplio al primer año de gobierno

Según el Frente Amplio, este primer año de gestión mostró un gobierno vanidoso, sin diálogo, polarizador, atrapado en su ortodoxia ideológica, con una respuesta insuficiente a las consecuencias de la pandemia. Un gobierno de promesas incumplidas y sin programa de desarrollo.

Actualizado: 04 de marzo de 2021 —  Por: Redacción 180

Vanidad, ortodoxia y falta de diálogo, las críticas del Frente Amplio al primer año de gobierno

Javier Miranda en la conferencia de prensa del Frente Amplio (Javier Calvelo / adhocFOTOS)

Así se podría resumir el planteo que el Frente Amplio realizó este miércoles sobre el primer año de gobierno. El documento que presentó la coalición de izquierda se titula “Balance del 2020. Principales temas y posicionamiento del Frente Amplio”.

“A diferencia de lo hecho en materia sanitaria, donde el gobierno demostró apertura al conocimiento científico, la respuesta ante la crisis económica y social quedó atrapada en la ortodoxia ideológica del gobierno. La política preponderante fue, y sigue siendo, la del ajuste fiscal, el recorte de las políticas públicas, de la reducción de la participación del Estado. La respuesta a la crisis económica y social ha sido definitivamente insuficiente”, dijo el presidente del Frente Amplio, Javier Miranda.

Miranda fue el encargado de hablar en el evento convocado por el Frente Amplio para analizar el primer año del gobierno. Miranda habló durante 12 minutos, hizo un resumen de un documento de 10 páginas que el FA colgó luego en su página web.

Le dirigente reconoció la actuación del gobierno en su respuesta sanitaria a la crisis por el covid-19; fue el único reconocimiento que le hizo al gobierno.

Dentro de las principales críticas planteadas en el discurso de Miranda y en el documento están:

  • la falta de diálogo deliberada del gobierno, la construcción de “un relato negando los logros de los gobiernos del Frente Amplio” y la búsqueda de polarizar la sociedad
  • el alto costo de mantener unida a la coalición evitando el enjuiciamiento de Guido Manini Ríos
  • ajuste fiscal en tiempos de crisis económica y social con respuesta insuficiente en estos frentes a los problemas generados por la pandemia
  • “la explícita intención de favorecer al 'malla oro' y aliviarlo del 'lastre' del Estado”

cuestionamiento a los números presentados como costo de respuesta a la pandemia, sobre todo la inclusión de “US$ 213 millones que corresponden a la caída estimada de la recaudación del BPS por las personas amparadas por el seguro de desempleo y de enfermedad (...) no significa una medida de apoyo a algún sector, ni implica gasto alguno”

Que buena parte de las medidas de ajuste fiscal se basaron en la pérdida de salario real de los trabajadores y por el efecto arrastre hacia las jubilaciones y pensiones.

Miranda también hizo énfasis en el incumplimiento de promesas electorales. “Estaba bueno cambiar”, dijon parafraseando el eslogan de campaña de Luis Lacalle Pou. “¿En qué quedaron las promesas electorales de bajas de impuestos y de no aumento de tarifas? Se aumentó el IVA, se aumentó el IRPF, se aumentó el Impuesto de Seguridad Social, se aumentaron las tarifas públicas, más de una vez y por encima de la inflación”, afirmó.

Sobre el final del documento presentado por el FA se plantea el punto “Más allá de la pandemia: ausencia de una agenda de desarrollo”.

Allí el texto plantea: “No hay un solo plan de crecimiento y desarrollo presentado. Amplios sectores empresariales empiezan a manifestar desconfianza ante la ausencia de propuestas políticas consistentes en ese sentido, para hacer frente a los desafíos de la productividad, de la competitividad, del desarrollo científico y tecnológico”.

Respecto a la recuperación de la crisis la visión de la oposición es que con la conducción del gobierno habrá problemas importantes y “la reactivación será tardía, débil e injusta”.

“Se anunció que se volcarán menos recursos al Fondo Coronavirus. Menos de lo que se gastó en 2020 que ya era francamente insuficiente. Los adelantos realizados en materia de infraestructura, que podrían ir en la dirección correcta, han sido difusos, con alto grado de incertidumbre en cuanto a su composición y la posibilidad de su ejecución en el presente año”, dijo Miranda.

El documento del Frente Amplio maneja varios datos. Algunos de ellos son proyecciones  y no datos consolidados: desempleo y pobreza. Son lecturas no oficiales de los datos.

“Se destruyeron 60.000 puestos de trabajo. En un año se cerraron 10.000 micro y pequeñas empresas. La pobreza aumentó en 100.000 personas”, afirmó Miranda.

Uno de ellos es el de la pérdida de 60 mil puestos de trabajo. Un dato que si bien ha sido muy manejado en las últimas semanas no es un dato consolidado, dado que compara los datos de desempleo de 2019 con los de 2020 que en su mayoría fueron tomados bajo una forma de emergencia de la encuesta continua de hogares que el INE todavía no ha analizado que tan comparables son.

Además Miranda manejó como dato el aumento de 100.000 pobres, esto no aparece en el documento del Frente Amplio y no es de ninguna manera un dato oficial, sino en todo caso proyecciones realizadas por diferentes actores.

Con base en un informe de Ricardo Leiva, para No toquen nada.