El estrés en las mujeres puede determinar mayores posibilidades de concebir una niña

Un estudio hecho por científicos de la Universidad de Granada (UGR) dio como resultado que las mujeres que padecen estrés tanto en el momento previo de quedar embarazadas como durante la concepción tienen casi el doble de probabilidad de tener una niña que un niño.

Actualizado: 04 de mayo de 2021 —  Por: Redacción 180

El estrés en las mujeres puede determinar mayores posibilidades de concebir una niña

foto: flickr.com/mestreech

La medida de cortisol en pelo tomada aproximadamente en la semana 8-10 de embarazo muestra la concentración de cortisol en la mujer embarazada en los últimos tres meses (un mes por centímetro de pelo), por lo que comprende el periodo previo y posterior de la concepción.

Una posible explicación de los resultados sería que la activación del eje del estrés, denominado eje hipotalámico hipofisiario adrenal, que implica un incremento en la secreción de cortisol, modifica las concentraciones de hormonas sexuales en el momento de la concepción. Sin embargo, los mecanismos subyacentes a esta modificación no están claros, ya que, por un lado, existe evidencia de que la testosterona podría influir en la determinación del sexo del bebé, ya que cuanto mayores son los niveles de estrés prenatal, mayores son los niveles de testosterona femenina.

Por otro lado, existen evidencias científicas de que los espermatozoides portadores del cromosoma X (cuya unión al óvulo determinará el sexo femenino del bebe) son mejores para atravesar el moco cervical en circunstancias de adversidad, por lo que al producirse cambios hormonales asociados al estrés, estos espermatozoides tienen más éxito para alcanzar el óvulo que los espermatozoides portadores del cromosoma Y (cuya unión al ovulo determinaría el sexo masculino del bebe).

“Existen otras posibles hipótesis que tratan de explicar este fenómeno. Entre ellas destaca la teoría según la cual se producen más abortos selectivos masculinos durante las primeras semanas de gestación ante situaciones de estrés severas, aunque dado el diseño de estos estudios recomiendan contrastar los resultados con mayor profundidad”, explica la autora principal de este trabajo, la investigadora del departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la UGR María Isabel Peralta Ramírez.

Lo que sí parece claro, y esto se ha demostrado en varios estudios, es que los fetos son vulnerables al efecto del estrés, ya que este juega un papel clave en su desarrollo. Un ejemplo de ello es el hecho demostrado de que los fetos masculinos (fetos XY) maduran más lentamente que los fetos femeninos (fetos XX); tienden a presentar más complicaciones del embarazo y parto prematuro; y al nacer, es más probable que tengan telómeros más cortos. De este modo, los fetos XY son más vulnerables a los entornos prenatales adversos, lo que sugiere que las mujeres muy estresadas en el momento de la concepción pueden tener menos probabilidades de dar a luz a un varón.

La Universidad de Cambridge publicó el trabajo en su sitio web y dice que estos resultados van en línea con varios estudios que muestran un descenso de nacimientos de sexo masculino después de la exposición a estímulos estresantes como terremotos, asesinatos, actos terroristas, etc.

Ficha

El trabajo se publicó en la Journal of Developmental Origins of Health and Disease.

En la investigación han participado 108 mujeres desde las primeras semanas de embarazo hasta el parto, a las que registraron sus niveles de estrés antes, durante y después de la concepción mediante la concentración del cortisol en pelo y diferentes test psicológicos