Juan Pedro Damiani se va a sacar otro gusto. Primero trajo a Julio Ribas como DT y ahora contrata a Giménez como gerente deportivo. “Sería un sueño poder tener a Osvaldo. Quienes lo vimos trabajar sabemos de su capacidad. Hace mil cosas a la vez”, declaró en su momento.
Atrás quedaron los ídolos Pablo Bengoechea y Fernando Morena, quienes no llegaron porque, a decir de Damiani, “no era el momento”. Desde este martes, Giménez comienza a trabajar como gerente deportivo.
El nuevo gerente viene de dirigir en China. Ese es su último antecedente. Antes, en su antiguo cargo, se fue mal de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF). En julio de 2007, cuando asumió como presidente de la AUF José Luis Corbo, la nueva administración descubrió que su último contrato que lo vinculaba a la Asociación lo había falsificado. Esto fue reconocido por el propio Giménez frente a Hernán Navascués y Corbo. Fue por ello que el Ejecutivo inhabilitó al nuevo gerente deportivo de Peñarol, a volver a ocupar un cargo en la AUF.
Corbo y sus compañeros sacaron una resolución a la que tuvo acceso 180 y en la que califica la falsificación del contrato de Giménez como “una muy grave falta funcional” y que constituye “un antecedente inhabilitante para que el señor Giménez pueda acceder a una nueva vinculación labral o profesional” con la Asociación. El Ejecutivo agregó en su documento que se comprobó “sin perjuicio del reconocimiento expreso del involucrado, que el mencionado ex funcionario había incurrido en una grave irregularidad administrativa al estampar sellos que contenían firmas no registradas personalmente por los representantes legales de la AUF". Esa falsificación le permitió a Giménez seguir cobrando su sueldo mensual durante dos años.
El nuevo gerente deportivo de Peñarol, también estuvo vinculado con otro episodio oscuro. De acuerdo a una denuncia del presidente de Liverpool, José Luis Palma, Giménez utilizó indiscriminadamente una tarjeta de crédito sin límite que pagaba la AUF sin presentar las rendiciones habituales después de cada viaje. Según Palma, Giménez solo rendía cuentas generales en lugar de detallar los gastos, hecho que fue rechazado por la Comisión Fiscal de la Asociación.
A Giménez tampoco le fue bien en el plano deportivo. Al frente de la gerencia de la AUF fue criticado por los diferentes técnicos de la selección por su incapacidad para conseguir partidos amistosos. Entre febrero de 2004 cuando enfrentó a Jamaica y Julio de 2005 cuando jugó con España, Uruguay no tuvo partidos ante otras selecciones. Las fechas FIFA, la selección las utilizó para enfrentar a Rocha y Getafe. Además, en los dos partidos ante selecciones también hubo problemas. Con Jamaica la selección no tuvo jugadores para completar el banco de suplentes y para jugar con España fueron a buscar tres días antes a Gustavo Munúa, del Deportivo La Coruña porque no había arquero suplente.
Cumpliendo funciones como gerente de la AUF, Giménez también defendió el viaje de la selección uruguaya en vuelo de línea a Australia, en ocasión de la repesca para el Mundial de 2006. “Uruguay llegó antes que los australianos, a ver qué dicen ahora” desafió a aquellos que criticaron el hecho. “Los jugadores uruguayos llegaron liquidados mientras los australianos fueron en un avión equipado especialmente y se detuvieron en una isla a hacer ejercicios regenerativos. No puedo creer que haya hablado en serio”, contestó enojado Fossati después de la eliminación.
A pesar de todo esto, Damiani está convencido que Giménez es el hombre para encargarse de toda la parte deportiva del club. El nuevo gerente tiene línea directa con el Grupo Casal y será el que decida qué jugadores llegan, cuáles se van y el próximo entrenador en caso de que no siga Víctor Púa.
