Reconocida por sus propiedades medicinales desde tiempos ancestrales, la planta de Aloe vera ha sido valorada por civilizaciones como la egipcia, la griega y la sumeria. Originaria de regiones tropicales y subtropicales, pertenece a la familia Liliaceae, junto al ajo, la cebolla y los espárragos, y hoy en día sigue siendo objeto de estudio por sus múltiples aplicaciones en salud y bienestar.
El Aloe vera se compone de dos partes principales: el látex, que contiene compuestos como aloínas y emodinas, y el gel interno, rico en agua, polisacáridos, vitaminas, minerales y ácidos orgánicos. Este gel ha demostrado tener efectos cicatrizantes, hidratantes y antiinflamatorios, lo que lo convierte en un aliado natural para el tratamiento de quemaduras, heridas y afecciones cutáneas. “Gracias a su capacidad para estimular la regeneración celular y favorecer los procesos de cicatrización, el Aloe vera promueve una recuperación de la piel de forma natural”, explicó Isabel García Tornadú, Científica Principal del área de Ciencia y Seguridad Global de Ingredientes y Productos en Herbalife.
Además de su uso tópico, el jugo de aloe es reconocido por beneficios como el alivio de la acidez y de las úlceras gástricas en casos de reflujo y ardor estomacal, gracias a su acción protectora sobre la mucosa del estómago¹. Estudios también muestran que ayuda a reducir la inflamación intestinal, favorece la digestión y la absorción de nutrientes², y contribuye a regular la glucosa y el metabolismo de los lípidos, con mejoras en la glucemia, el colesterol y la sensibilidad a la insulina en personas con diabetes³.
Otro efecto conocido es el laxante, asociado exclusivamente a compuestos presentes en el látex, como las antraquinonas (aloínas y aloe-emodina).
Detalles que marcan la diferencia
No todos los jugos comerciales de Aloe vera tienen la misma calidad. Los productos enriquecidos con polisacáridos, como el acemanano, pueden variar en su eficacia y ofrecer beneficios más específicos. Además, para un consumo diario seguro, el contenido de aloínas debe ser inferior a 1 ppm. “Por eso resulta esencial elegir jugos de aloe de alta calidad, elaborados con procesos exclusivos de purificación con filtrado con carbón activado, proceso conocido como decoloración. Este método elimina las aloínas, pero conserva sus componentes naturales y bioactivos”, añadió García Tornadú.
Para fortalecer esta seguridad, Herbalife desarrolló y patentó un método innovador, certificado por la AOAC INTERNATIONAL, referente mundial en ciencia analítica, que permite identificar y medir con precisión la aloína A, la aloína B y la aloe-emodina en productos de Aloe vera. Validado en ocho laboratorios independientes, el método aplica tecnologías avanzadas, como cromatografía líquida de alta resolución y espectrometría de resonancia magnética nuclear, asegurando estándares internacionales de calidad, pureza y trazabilidad, y garantizando que los productos cumplan con los límites seguros de aloínas para consumo diario.