Resolución judicial en el caso de la agresión a Tania Ramírez

Sobre el origen de la agresión, Fernández Lechini afirma en el escrito que hay “dos versiones contrapuestas y ninguna de ellas ha logrado imponerse”. Una es la que cuenta Tania y otra la de las ahora procesadas.

La disputa surgió por un taxi que tanto Tania como las procesadas quisieron parar. Tania afirma que cuando se dio cuenta de que no le paró a ella, se dio vuelta y buscó otro coche. En ese momento escuchó que las mujeres le gritaban que no le paró a ella por “su condición de afrodescendiente”.

Entonces, según su relato, Tania se acercó al taxi y les dijo “que era afrodescendiente, que tenía el cabello crespo y que no tenía problema con ello”. Ahí, Tania habría dicho que a ellas les paraba porque eran “putas”. Entonces comenzaron las escupidas desde las mujeres hacia Tania y su amigo. Él respondió, las mujeres se bajaron del taxi y comenzaron a agredir a Tania.

Las mujeres cuentan que ellas pararon el taxi y se subieron. Entonces, Tania se acercó y le dijo al tachero: “muerto de hambre, a ellas le parás porque son changos, a mí no me parás porque soy negra”. El escrito afirma que “las indagadas bajaron y se produjeron cambios de palabras que fueron seguidos de violencia física”.

El juez afirma que existen elementos de convicción suficientes para sostener que las mujeres “insultaron y golpearon” a Tania “diciéndole ‘negra de mierda’, ‘hacete una planchita’, ‘negra hija de puta’. Tania respondía “que eran ‘patoteras’ y que no la golpearan”.

Una de las acusadas, que aún permanece prófuga, es la madre de otra de las mujeres. Según el fallo, se acercó a Tania para pedirle que dejara las cosas como estaban, que ella era la madre de una de las mujeres. Tania le dijo que si era su hija se la llevara y la educara. La madre reaccionó “aplicando un golpe con la cabeza sobre el rostro” de Tania.

Luego de esto, las agresoras llegaron a Tania, la tiraron al piso y con piñazos y patadas le provocaron las lesiones que pusieron en riesgo su vida, incluso lacerándole el hígado.

“Las lesiones son graves puesto que la víctima estuvo en peligro de perder la vida”, dice el fallo. “El procesamiento es con prisión dado que es menester estar al informe definitivo de las lesiones” de Tania, agrega.

En esta instancia el juez no encontró elementos suficientes para tipificar racismo. Fernández Lechini no descarta que esto se pueda demostrar en futuras instancias, según declaró a la prensa.