La escuela estuvo abierta hasta el martes. Durante una semana Primaria habilitó algunos salones y cada padre decidía si enviaba a sus hijos. La propuesta era que los alumnos se agruparan en los salones habilitados. Una semana después Primaria cambió la medida. Cerró la escuela y repartió a los alumnos en distintas locales de la zona.
Denise Vázquez, inspectora técnica de Primaria, contó a qué lugares fueron trasladados los alumnos. “Los maestros y la dirección junto con la inspección estuvieron organizando la concurrencia de los distintos grupos de ambas escuelas a locales alternativos que fueron ofrecidos por la comunidad. El Colegio Santa Clara ofreció dos salones, el Colegio Santa María de la Ayuda también ofreció espacio, el Club Rampla Juniors, el local de la ex Federación Autónoma de la Carne y cooperativas de viviendas”, afirmó. Se piensa en cada uno de esos lugares puedan recibir uno o dos grupos de la escuela, ya que ninguno de los edificios tiene la posibilidad de albergar escuelas como estas que tienen 500 alumnos cada una.
La inspectora dijo que esta medida permitiría asegurar la reparación del edificio y que los alumnos regresen a la escuela. “Es a los efectos de poder asegurarnos que lo que aparentemente está correcto, lo sea también desde el punto de vista técnico y que la estructura de todo el local no ofrece riesgo para estar funcionando normalmente. Lo que nos va a llevar a que en los próximos días se termine de controlar los reboques, los que tendrían la posibilidad de desprenderse y a determinar progresivamente la habilitación de las aulas”, afirmó Vázquez.