El texto deja por fuera a los datos enciclopédicos y biográficos e intenta dar “una idea cabal de la auténtica dimensión de Galeano, que radica en su extrema humanidad”.
Para ello, recordaron un acto público en Madrid en el que el escritor fue ovacionado. “Allí, delante de todos, había una persona que nos conmovía, en el sentido más literal del término, no porque dijese cosas bonitas, sino por la suave firmeza con la que aquellas palabras, hermosas sin lugar a dudas, despertaban en el público la conciencia de lo que muchas veces pensamos y no nos atrevemos a decir”, afirma el comunicado de Siglo XXI.
Continua diciendo que Galeano, “un ser humano con mayúsculas”, “con delicada firmeza denunciaba la injusticia para con el otro” y reivindicaba la dignidad de las personas en cada una de sus palabras, gestos y miradas.
Además, el texto destaca que el autor hacía todo esto “sin alzar la voz, sin un solo grito, con un ritmo sosegado pero constante que, como su prosa, concisa, directa, aparentemente sencilla, ahorrando palabras para decir todo, penetra lentamente, como gotas de agua, en el ánimo de quien lo escucha (o lee)”.
“Porque para que a uno le oigan no es necesario gritar, basta con tener razón. Y Galeano la tenía”, finaliza el comunicado.