Entrevista de Joel Rosenberg y RIcardo Leiva con José Arocena, en No toquen nada de Océano FM.
Joel Rosenberg: ¿Cómo llega la Corte Electoral a este fin de semana?
José Arocena: Bien, es una elección complicada. Sobre todo, porque son dos elecciones simultáneas y diferentes, lo que complica un poco la preparación pero sobre todo el riesgo de confusión del ciudadano, que no sepa bien lo que tiene que hacer.
Ricardo Leiva: ¿Ese es el problema principal? Más allá de la complejidad del escrutinio...
JA: Sí. Diría que hay dos situaciones bien distintas en el país. En el interior hay mucho menos confusión porque los municipios, de acuerdo a la ley, están situados en ciudades relativamente pequeñas. No todo el territorio nacional está dividido en municipios, por ejemplo, sólo tres capitales departamentales tienen municipios: Maldonado, Canelones y Montevideo. Todas las demás capitales no, por lo que ahí se vota solamente la autoridad departamental. Entonces, este tema genera en Montevideo, particularmente, una situación de ocho circunscripciones municipales que no están totalmente interiorizadas por la ciudadanía, por decirlo de alguna manera. El ciudadano de Montevideo todavía no se ubica claramente en la temática municipal.
A ello contribuye una cantidad de factores. La costumbre es que la persona saque la credencial a los 18 o 19 años y suelen seguir con la misma cuando tienen 40 o 50. El traslado complicaría mucho menos la elección porque yo sé que en el municipio en el que vivo es en el que voto. Ahora, si voto en un lugar distinto al que vivo, ahí empieza a complicarse. Cuando se reparten los sobres con las listas, se suele dar uno armado con la hoja departamental y la municipal. Hay que tener mucho cuidado de que en ese sobre esté el municipio que corresponde, no en el que vive el votante. Esto va a conducir a que haya algunos problemas o errores.
RL: Eso fue contemplado en el reglamento porque se estableció una anulación parcial de voto para quienes voten en municipio equivocado.
JA: Exactamente. Hicimos lo que llamamos la excepción porque normalmente un municipio equivocado debería anular. Pero somos conscientes de todas estas dificultades entonces dijimos, vamos a tratar de que no se anule el voto departamental cuando hay un error en el voto municipal.
Joel Rosenberg: Sí se anula, obviamente, el voto municipal.
JA: Claro, ese se anula pero el departamental se considera válido y esto soluciona un poco el problema. Por lo menos, no hace pesar el error municipal sobre la elección departamental.
JR: También, vale aclarar que en el sitio, en la página de la Corte Electoral, se aclara en qué municipio va a votar uno. Eso puede ser una ayuda para saber si va a votar en otro municipio.
JA: Sin duda. Me animo a decir que la página de la Corte ha mejorado mucho y hoy en día es muy informativa. Cuando uno abre el "inicio" de la página, aparece un comunicado de prensa en el que la Corte señala los problemas principales. Creo que ahí hay un elemento interesante para que todo el mundo lea. Y también, hay otra cosa interesante que hemos hecho para esta elección por primera vez, que es la filmación de una clase que se da a los funcionarios públicos que integran las comisiones receptoras de voto. Acá se hizo una clase especial y gracias a la colaboración de la Presidencia de la República y el Sodre, pudimos hacer tres videos que han resultado realmente muy interesantes para un ciudadano que quiera informarse un poco más. Hay uno sobre la introducción y cómo se instalan las comisiones de votos, hay otro sobre el escrutinio en Montevideo -que tiene sus particularidades- y el último es sobre el escrutinio en el interior.
Ricardo Leiva: Además de esto que hablábamos de la necesidad de fijarse bien en el municipio en el que está votando y hacerlo correctamente, está el tema del voto cruzado, algo que no está prohibido en la ley pero sí en los dos reglamentos que se hicieron para las elecciones municipales en la Corte Electoral, donde se prohibió. ¿Cuál es la explicación de que esté prohibido el voto cruzado y no se pueda votar a dos partidos distintos a nivel departamental y a nivel municipal?
JA: Hay dos bibliotecas sobre eso. En realidad, la primera prohibición en 2010 se justificó porque se estaba iniciando el proceso y no querían cambiar lo que tradicionalmente se daba en Uruguay de que no se puede poner hojas en el mismo sobre de distintos lemas. Esta vez, el tema fue más discutido y la Corte misma no se puso de acuerdo, terminó votando por mayoría. Acá lo que hay es un vacío legislativo.
Joel Rosenberg: Cuando dice que salió por mayoría dentro de una elección de los ministros, está diciendo que la mayor parte de los que representan a los partidos allí adentro, no lo quisieron votar.
JA: Sí, hubo posiciones distintas dentro de los partidos. Yo soy neutral completamente en la Corte y, obviamente, mi voto pesa porque a veces inclina la balanza. En este caso hubo una mayoría muy clara de 6 a 3, que decidió rechazar el voto cruzado.
Ricardo Leiva: Eso implica que si hay voto cruzado hay anulación. Porque esto puede ser un detalle que combinado con lo anterior puede generar confusión. Si hay un voto cruzado pero la papeleta municipal es de un municipio que no corresponde en Montevideo, ¿qué pesa antes, la anulación parcial del voto en el municipio o la anulación de todo el voto?
JA: Pesa el voto cruzado, se anula todo el voto. El voto cruzado está específicamente prohibido. Acá hay una interpretación de la Corte porque la ley no dice nada sobre el voto cruzado.
RL: Lo define la Corte en el reglamento.
JA: Al no estar la definición en la ley, la Corte no tiene más remedio para poder tener una posición clara, al menos para esta elección. Por eso la Corte tuvo que hacer esta votación que lo terminó rechazando.
Joel Rosenberg: Uno entiende que hay un proceso, pero lo lógico sería que uno pueda votar en las municipales por separado
JA: Esto se va a tratar en la legislatura que ya empezó, como otros temas que también van a ser reformulados. La temática municipal la va a tratar esta legislatura.
Ricardo Leiva: Voy al tema del escrutinio. En 2010, en la elección municipal y departamental anterior, la sumatoria de escrutinios primarios terminó 16 horas después de que se cerraron las urnas, ¿puede ser?
JA: Sí, terminó cerca de las cuatro de la tarde del lunes en 2010.
RL: O sea que demoró un poco más de lo que estamos acostumbrados, ¿o es normal?
JA: Para esta oportunidad, teniendo en cuenta ese antecedente, hemos hecho un esfuerzo para que termine antes. Lo que hemos tratado de hacer es aumentar el número de digitadores porque la clave de la demora es la digitación. Las actas las envía cada mesa de votación a un centro zonal en el caso de Montevideo y en el interior a las capitales departamentales o en algunos departamentos hay centros descentralizados. De esos centros en que se reciben las actas, van al lugar a donde van a ser digitadas, es decir, integradas al sistema. Esa digitación es lo que demora más o menos según la complejidad de lo que hay que digitar y de acuerdo al número de digitadores.
Joel Rosenberg: Usted nos había dicho en una oportunidad que tienen que ser digitadores donde se conforme un equipo.
JA: Exacto, tiene que haber contralor partidario.
Ricardo Leiva: En parejas de partidos distintos.
JA: Exactamente.
Joel Rosenberg: ¿Cuántas parejas van a tener?
JA: Serán 30 parejas esta vez. En 2010 fueron bastante menos, yo no estaba en la Corte, no recuerdo exactamente cuántas fueron.
JR: Es el filtro por donde pasa todo...
JA: Claro. Además, hay 15 parejas de revisores. O sea, está el que digita con su computadora y frente a él tiene una mesa con otra máquina donde están los revisores. El dato que él manda al sistema es chequeado por los revisores. No es solamente la digitación sino que además hay una revisión. En los dos casos hay contralor partidario.
Ricardo Leiva: Y con ese panorama, ¿qué tiempos se esperan para el escrutinio?
JA: Yo le diría el tiempo que estimamos y al que vamos a hacer todo lo posible para llegar, que es entre las 11:00 y las 12:00 del lunes. Es lo que estamos tratando. El número de digitadores aumentó mucho desde 2010, así como también el número de revisores.
Joel Rosenberg: ¿Eso es un tema de presupuesto simplemente?
JA: De presupuesto y de funcionarios que tengan la habilidad de digitar, por decirlo de alguna manera. No todos los funcionarios están preparados para digitar. Tratamos de mantener la tradición de que los digitadores sean funcionarios electorales. Uno podría pensar en hacer un contrato con una empresa de digitación y que mande sus digitadores. La Corte prefiere y ha preferido tener funcionarios electorales con los cuales aseguramos que hay un conocimiento más allá de la digitación que están haciendo, y por otro lado, el famoso contralor partidario, que no existiría si lo hiciera una empresa.
Ricardo Leiva: Con esto que dice de tratar de terminar el escrutinio al mediodía del lunes, uno piensa que las 19 intendencias y 112 municipios van a estar claros el día después de la votación. Pero es probable que esto no sea así.
JA: Es probable que no sea así. Puede que sea necesario esperar al escrutinio definitivo porque va a haber situaciones en algunos departamentos -según lo que parecería por lo que muestran las encuestas- en los que el resultado va a ser muy cerrado. Como no se escrutan en el escrutinio primario los votos observados, puede ser que hagan la diferencia. Es posible que el escrutinio definitivo defina algunas intendencias.
Joel Rosenberg: En los últimos días surgió con insistencia que en las empresas nos están pidiendo a los trabajadores el comprobante de haber votado en las elecciones para cobrar el sueldo. Esta es una disposición del Banco de Previsión Social, no es de ustedes...
JA: No. La obligatoriedad de tener la constancia de voto para cobrar aparece en la ley, en la última de partidos políticos, que en uno de sus capítulos plantea las sanciones que supone el no cumplir con la obligatoriedad del voto. Entre ellas, está que las empresas y organismos del Estado no pueden abonar sus sueldos si no se presenta la constancia de voto. Ahí hay un problema complicado porque muchas veces el ciudadano pierde la constancia de voto, es un papelito. Han tenido que ir a la Corte a pedir otro, algo que es muy fácil, se le da enseguida pero tiene que hacer el desplazamiento.
JR: Está bien que está en la ley, es cierto que el BPS no llamaba a las empresas a que lo hicieran entonces éstas tampoco intimaban a los trabajadores. ¿No hay una forma de que el BPS sepa a través de la Corte Electoral que la persona votó?
JA: Estamos en este momento haciendo un acuerdo con el BPS. Dadas todas estas situaciones que se han planteado, tenemos totalmente informatizada -y para todas las elecciones va a ser así- la lista de votantes y no votantes. Es decir, en los 19 departamentos del país ya están las listas de la gente que votó y de la que no. En este momento estamos en contacto con el BPS tratando de llegar a un acuerdo para que puedan tener la lista de no votantes. De manera que tiene, por lo tanto, la lista de votantes. Si para el BPS, la empresa, el organismo del Estado alcanza con la lista informática que nosotros les pasamos, son ellos los que tienen que decidir porque, en definitiva, es una lista informática, no es una constancia de voto. Estamos en esas conversaciones para ver si podemos solucionar un poco este problema de las constancias de voto, que ha sido muy complicado.
RL: Hablando de avances tecnológicos, estamos terminando un ciclo donde hubo un intento de insertar algo de tecnología en el trabajo de la jornada de votación, de las mesas receptoras de votos que quedó trunco. ¿Qué expectativas se tienen a partir de ahora para que en el próximo ciclo electoral podamos tener algo de tecnología incorporada?
JA: Me tocó asumir la presidencia justo después de las elecciones internas aquellas en las que hubo problemas, sobre todo con la transmisión online de los resultados de cada comisión receptora. Nosotros para el 26 de octubre, 30 de noviembre y para ahora hemos decidido -en acuerdo con los partidos- no probar más el tema, por ahora, y seguir con el método tradicional en este período. Pero la Corte está dispuesta y, de hecho, ya ha empezado a estudiar procesos posibles a aplicar en Uruguay.
Por ejemplo, Venezuela tiene un voto electrónico total, al igual que Brasil. Argentina tiene el mismo método tradicional que nosotros pero con un sistema de envío de las actas por correo y tiene a la provincia de Salta con voto electrónico. En otros países europeos, hubo voto y se ha suprimido. En Alemania, si no me equivoco en el 2008, lo hubo y poco tiempo después el tribunal constitucional alemán decidió volver al sistema tradicional. La razón que puso el tribunal es discutible como cualquier otra pero fue que en la Constitución alemana el ciudadano alemán tiene derecho a votar y controlar su voto, obviamente, a través de los partidos. Se suponía -o era lo que estimaba el tribunal- que con el método electrónico, el control de los partidos sobre lo que pasaba después de que el ciudadano vota era imperfecto. Entonces decidió volver al sistema tradicional. Perú está tratando también de instalar el voto electrónico y lo ha hecho en elecciones locales con resultados que ellos mismos dicen que no logran los niveles que quisieran.
Ricardo Leiva: Esto es sobre voto electrónico y no sobre tecnología en la transmisión de datos.
JA: La transmisión online tiene dos tipos de dificultades. Por un lado, el estado de la conectividad en el país no es ideal todavía, no es parejo, algunas zonas no tienen buena conectividad. Por otra parte, hay un problema de capacitación de los funcionarios que integran las mesas de votación. No es lo mismo manejar papel y lápiz que una computadora. Acá hay distintos tipos de problemas. La capacitación probablemente en las elecciones internas no fue suficiente. La capacitación para funcionarios que necesitan entrar en el tema informático debería ser bastante más importante que la simple que se da ahora para el método tradicional. Hay muchas cosas a considerar que la experiencia de la elección interna del año pasado sirve para avanzar pero teniendo en cuenta los problemas que se manifestaron.