Tras el asesinato de la joven Valeria Sosa a manos de su expareja, el Ministerio del Interior publicó en su página web un artículo titulado "Contra toda violencia hacia las mujeres".
El texto recuerda que desde 2015 está vigente el "Protocolo de actuación en materia de violencia doméstica y/o género en el ámbito del Ministerio del Interior", el cual es "un instrumento de abordaje integral para prevención, atención, sanción y reparación en los casos que involucren a funcionarios de la cartera".
"La infame muerte de una mujer a manos de su ex pareja (policía en actividad), caló hondo en la Secretaría de Estado, dejando de manifiesto que no basta la confección de protocolos si no se garantiza la eficaz aplicación de los mismos", agrega.
"En ese sentido, y con el profundo dolor que significa para las autoridades una muerte que pudo y debió evitarse con las medidas dispuestas en ese instrumento, se sustanciaron acciones para aclarar los hechos y/o circunstancias que llevaron a este lamentable y doloroso resultado", dice el artículo.
El ministerio "no vacilará en aplicar las más duras medidas que estén a su alcance sobre los presuntos responsables", asegura, ya que "una herramienta como el protocolo en cuestión pudo y debió evitar esta muerte".
"El Ministerio del Interior hace llegar a la ciudadanía en general y a las personas en situación de violencia doméstica y/o de género en particular, su más absoluta solidaridad y la renovación del compromiso asumido junto con la profundización de las acciones para la protección de las víctimas", concluye.
"Conmoción" en Naciones Unidas
Este hecho y las otras tres muertes de mujeres en lo que va del año provocaron una declaración pública de las Naciones Unidas en Uruguay.
"Las Naciones Unidas en Uruguay expresan su conmoción y total rechazo ante los asesinatos de mujeres ocurridos en lo que va del año, perpetrados por sus parejas o exparejas, algunos de estos en presencia de sus hijos e hijas", señala el texto.
El comunicado recuerda que el año pasado 29 mujeres fueron asesinadas a manos de sus parejas o exparejas, cinco más que en 2015. "Uruguay no puede permitirse que la violencia se naturalice como práctica común", dice el texto.
"Exhortamos a la población a ser proactiva en denunciar las situaciones de violencia a su alrededor, como primera forma de no ser sujetos pasivos ante la violencia basada en género, y a las autoridades a considerar y responder prontamente a estas denuncias", agrega.
