"Tenemos que rechazar a los eternos catastrofistas y sus predicciones de apocalipsis", dijo Trump, pocas horas después de que Thunberg, que también está en Davos, denunciara que "no se ha hecho nada" para luchar contra el calentamiento global.
Trump acusó a los "herederos de los insensatos adivinos del pasado" de equivocarse en el cambio climático, como ya hicieron, según él, cuando décadas atrás predijeron la superpoblación del planeta o el final del petróleo.
"Nunca dejaremos a los socialistas radicales destruir nuestra economía", afirmó, en una posible referencia a sus rivales demócratas en las elecciones estadounidenses del próximo mes de noviembre.
El discurso de Trump, ante una sala llena de líderes políticos y económicos, se centró en destacar con abundantes cifras los logros económicos durante su presidencia.
También subrayó el aumento de la producción de petróleo, gas y carbón que "ha tenido tanto éxito que Estados Unidos ya no necesitará importar energía de naciones hostiles".
