Liceales jurando la bandera, un acto al menos “ilegal”

El profesor de historia Leonardo Borges, autor del libro “Cual retazo. Anacronismos de jurar la bandera” dijo esta mañana en No toquen nada que el acto de jurar la bandera al que están obligados los 19 de junio los adolescentes en los liceos es inconstitucional.

Actualizado: 19 de junio de 2018 —  Por: Redacción 180

Liceales jurando la bandera, un acto al menos “ilegal”

Adhoc ©Javier Calvelo

Además del Día del Abuelo y del Natalicio de Artigas, el 19 de junio es el Día de la Bandera en Uruguay. Por esa razón, los escolares de primer año prometen la bandera y los liceales, la juran.

“Lo de la jura es bastante vinculante, no es inocua. Se le está obligando a un menor a jurar y el juramento es algo que no existe en la jurisprudencia uruguaya. De hecho la Constitución dice que si soy un reo y juro que maté a fulano, el juro se saca porque es religioso. O sea, no existe el juramento y se le obliga a un menor de edad a hacer algo que la ley no dice. Yo planteo que es que inconstitucional. Algún abogado amigo me ha dicho que es ilegal”, consideró.

Para la realización de su libro sobre la jura de la bandera, publicado en 2005, Borges estudió entre otras cosas el debate parlamentario que aprobó la ley en la que se basa el acto, en la década de los años 40 del Siglo XX. La norma era de instrucción militar obligatoria, el artículo de la jura de la bandera fue incluído en el proceso y, según Borges, el espíritu no implicaba hacer jurar a menores de edad.

“El espíritu del legislador no es que juren los chiquilines. Es que juren los mayores de 18”, dijo. La ley dice que juren todos los ciudadanos. “El espíritu de la ley era que juraran los mayores, los reservistas”, dijo.

Borges es actualmente profesor de formación docente y también fue asesor en el Ministerio de Defensa. En No toquen nada contó que oficiales militares le comentaron su discrepancia con las opiniones que figuran en su libro sobre la jura de la bandera. También dijo que el nacionalismo uruguayo tiene una idea de si mismo que niega alguno de sus componentes.

“A pesar de que uno crea que Uruguay es un país laico, abierto, democrático, de alguna forma posee un 'síndrome de pueblo elegido' que tiene que ver con un 'enano fascista' que late y vive en nosotros y que salta cuando tocan determinadas fibras nacionales. Y es un nacionalismo que no es como el argentino que es más material, simbólico, sino que tenemos un nacionalismo derivado de cómo nace el país, de la secesión de la Argentina, que desesperadamente busca afirmarse como nación a través de este tipo de cosas”, afirmó.