La ganadería uruguaya ante el desafío de ser más eficiente y con menor efecto invernadero

El plan Producción Ganadera Climáticamente Inteligente y Restauración del Suelo en Pastizales Uruguayos, llevado adelante por varios actores gubernamentales, busca demostrar que se puede aumentar la productividad del campo natural, reduciendo las emisiones de efecto invernadero.

Actualizado: 15 de octubre de 2021 —  Por: Redacción 180

La ganadería uruguaya ante el desafío de ser más eficiente y con menor efecto invernadero

Pablo PORCIUNCULA / AFP

Los ingenieros agrónomos Soledad Bergós y Pablo Soca estuvieron en No toquen nada para hablar de esta experiencia liderada por la Facultad de Agronomía. El programa busca mejorar el manejo del campo natural, evitando el sobrepastoreo.

El sector agropecuario es responsable de aproximadamente 75% de las emisiones nacionales de gases de efecto invernadero (GEI) en Uruguay, y el sector ganadero vacuno explica el 62% del total de emisiones.

“El principal gas de efecto invernadero en Uruguay es el metano. Ese metano proviene de lo que es la fermentación ruminal que se da en ese proceso digestivo que hacen los rumiantes que les permite digerir forrajes muy groseros. Eso genera un subproducto que es el metano y el metano sale en los eructos de las vacas”, explicó Bergós.

“Por eso decimos que la ganadería en Uruguay es un sector prioritario para las actividades de mitigación. Ese es un proceso natural que se da en la rumia, no podemos evitar que las vacas generen metano. Lo que sí podemos hacer es a través de determinadas medidas es disminuir la intencidad de esas emisiones. Disminuir la cantidad de gases de efecto invernadero por kilo de carne producido. ¿Cómo? Haciendo más eficientes los procesos productivos y mejorando la calidad de la dieta”, agregó.

El informe señala que “una de las vías para lograr ese resultado es mejorar la digestibilidad de la dieta. La segunda manera de producir más carne sin que las emisiones de metano aumenten es cambiar la estructura del rodeo hacia animales más jóvenes al entore y a la faena, e incrementar el porcentaje de preñez, para no tener vacas 'vacías'. O, dicho de otro modo, producir la misma carne con menos animales”.

Hace más de dos años que se aplica este plan y ya recogió resultados en 61 predios ganaderos. Algunos resultados son que la preñez pasó de 71 a 77%. Además la producción de carne vacuna y ovina mejoró, los costos bajaron y el ingreso neto también subió. También subió el índice de cría vacuna, lo que significa que se empezó a gestionar mejor el rodeo. El 60% de los predios mejoró un 50% su ingreso neto.