“En las formalizaciones por rapiña y por hurto, en los meses de marzo, abril y mayo, la cantidad es superior a los que teníamos en octubre de 2017. Creemos que en la medida en que se han mejorado los procedimientos de trabajo interno, que se han ajustado las competencias y la distribución de las cargas de trabajo, los resultados han mejorado rapidamente”, dijo Díaz.
El fiscal de Corte adelantó que esa oficina pedira un incremento presupuestal “importante” en la Rendición de Cuentas.
“Si tenemos un 60% más de las cargas de trabajo que habíamos estimado, necesitamos reforzarlo”, afirmó.
Con sus declaraciones en el Parlamento Díaz ratificó los datos del informe de la fiscalía que señalaban una estabilización de los resultados del nuevo sistema penal, medido en formalizaciones, comparables con los procesamientos del código anterior. Esto estaba planteado en el informe en respuesta al diputado Pablo Abdala para los meses de marzo y abril, ahora Díaz agregó mayo.
Estos son los mismos datos que fueron cuestionados en No toquen nada por el senador empepista Charles Carrera, ex número tres del Ministerio del Interior y principal impulsor del proyecto de reforma del CPP a estudio en la Comisión de Constitución y Legislación del Senado.
No toquen nada confirmó con fuentes de la Fiscalía que en las reuniones posteriores a esa entrevista, el MI no negó la seriedad ni las fuentes de la información que manejó la Fiscalía en su informe en respuesta al diputado Pablo Abdala. El dato que Díaz reafirma en sus declaraciones públicas es que, a partir de marzo y después de las dificultades iniciales -y aún con vulnerabilidades presupuestales para el trabajo de los fiscales- el nuevo CPP funciona con la misma o mayor eficacia que el anterior.
