El proyecto que considera el Parlamento es menos restrictivo que uno que se había presentado previamente y que prohibía toda la pirotecnia. Ahora se habla de “pirotecnia sonora”.
En una entrevista con No toquen nada, Pérez Bonavita dijo que los petardos que se conocían como bombas brasileñas ya casi no se encuentran porque se ha eliminado ese contrabando y existen otros productos más seguros con el mismo efecto. Por esta razón, consideró, los accidentes han disminuido.
De todos modos, “está a estudio la eliminación de ese tipo de petardos porque realmente queremos que esta señal sea unánime y podamos avanzar todos en el proyecto, convencidos de que es el que tenemos que tomar”, dijo la legisladora.
Una alternativa sería limitar la cantidad de pólvora que tienen los petardos. Ahora se estima que tienen tres gramos y el límite se podría establecer en 0,5 gramos, dijo. Además del ruido, “eso disminuye ampliamente las posibilidades de lesión”, dijo.
El objetivo, según Pérez Bonavita, es que el proyecto de ley sea viable y que regule la pirotecnia “que hace mayor daño” para aquellos colectivos que estuvieron en contacto con ella solicitando la regulación. Fundamentalmente se trata de grupos que promueven los derechos de las personas con trastorno del espectro autista y también protectoras de animales.
“Si hay algo que quiero destacar es que en estas comisiones ha habido muchísimo diálogo, hemos recibido a todas las partes y por supuesto hemos contemplado lo que las partes nos enseñaron, nos vinieron a demostrar. Estamos trabajando en varias modificaciones, todos los partidos juntos, en primer lugar una corrección que hay que hacer es que la pirotecnia no sonora no existe como tal. Cualquier tipo de pirotecnia, así sea una benaglita infantil de las que son de luces, hace ruido. Dentro de los principales cambios estamos considerando una escala de sonido que iría disminuyendo año tras año hasta que realmente se maneje pirotecnia con muy poco estruendo”, afirmó.
